visto bueno

Dirigente de Cleveland apoya que José Ramírez juegue en Lidom

José Ramírez en un partido contra las Águilas Cibaeñas.

José Ramírez en un partido contra las Águilas Cibaeñas.

Como nuevo manager de los Guardianes de Cleveland, Stephen Vogt está bien consciente de quién es la mayor figura de su equipo. Esa figura, por supuesto, se trata del tercera base dominicano José Ramírez, alma del club y uno de los grandes líderes del clubhouse desde hace muchos años.

Por primera vez en ocho años, Ramírez ha decidido jugar béisbol invernal en la Liga Dominicana, ahora que fue cambiado de los Toros del Este a los Leones del Escogido por su compatriota Vladimir Guerrero Jr. Para muchos equipos de Grandes Ligas, sería dudosa la idea de dejar que su mayor estrella jugara pelota invernal. Pero para Vogt y los Guardianes, lo hecho por Ramírez – tras jugar más de 150 partidos en cada una de las últimas tres campañas – es algo bienvenido.

“Creo que es algo grande que él pueda jugar ante su gente en casa”, dijo Vogt acerca del oriundo de Baní. “Sé lo orgulloso que es de ser de donde es y lo que significa la Liga Dominicana para él. Hablé con él antes de que se fuera y me expresó lo emocionado que estaba de jugar ante ese público, esa gente.

“Yo no podría estar más contento por él. Es algo bien bueno”.

Tras batear .282/.356/.475 (OPS de .831) con 36 dobles, 24 jonrones, 80 empujadas, 28 bases robadas y OPS+ de 131 en 156 juegos por los Guardianes en el 2023 – año en que asistió a su quinto Juego de Estrellas y tercero consecutivo – Ramírez se integró al Escogido el mes pasado. Llegó al miércoles bateando de 23-4 (174) con un jonrón, cinco empujadas, siete bases por bolas y ocho anotadas por los Leones.

“José se ha ganado esa oportunidad”, dijo Vogt al ponérsele el tema de cómo la organización de Cleveland ve la participación de sus veteranos en ligas invernales. “Si él quiere hacer eso, confiamos en que va a estar listo para hacerlo. Nunca va a hacer algo cuando no esté listo. Entonces, si alguien como él, de su estatus, quiere ir a jugar ante su pueblo, ¿quién soy yo para decir que no? Se ha ganado ese derecho”.

El mismo Vogt, exreceptor de Grandes Ligas nombrado como capataz de los Guardianes en esta temporada muerta, conoce el béisbol invernal de Venezuela y Colombia. En el 2011-12, jugó en 32 partidos en la LVBP con los Leones del Caracas, bateando .258/.323/.425 con tres cuadrangulares.

“Nada me preparó más para jugar en Grandes Ligas que ir y jugar pelota invernal en Venezuela”, afirmó Vogt, quien participó en 10 temporadas de las Mayores con los Rays, Atléticos, Cerveceros, Gigantes, Diamondbacks y Bravos. “Es Juego 7 todas las noches. Cuando das hit, te quieren. Cuando te ponen out, quieren que vuelvas a casa y te lo dejan saber. Me tiraron fuegos artificiales, botellas de cerveza, botellas de agua, de todo. Es el béisbol más intenso que he jugado, aparte de las Mayores”.

En cuanto a Ramírez, el hecho del antesalista comprometerse con el Escogido es un recordatorio de la fama que tiene como una persona dedicada a su profesión.

“Lo confirmó todo”, manifestó Vogt. “Cómo él camina en el terreno. Ese estilo de caminar te dice todo lo que necesitas saber de él, que es que jamás va a dejar de trabajar. Nunca va a dejar de luchar. Nunca queda satisfecho. Va a continuar queriendo ser la mejor versión de sí mismo y va a seguir mejorando.

“Cuando tu mejor jugador y tu líder se comporta así, vas a querer hacer lo mismo si eres otro pelotero en ese clubhouse. Vas a querer hacer las mismas cosas que está haciendo José de manera regular. No veo la hora de conocerlo más y verlo jugar todos los días”.