CON LOS CAMPEONES
Misceláneos de jugadores dominicanos en GL (III)
Con miras a la campaña de 1984, los Metros de Nueva York promocionaron al lanzador derecho Dwight Gooden, de 19 años, como la nueva sensación del béisbol. El conjunto ya contaba con el jardinero y bateador zurdo Darryl Strawberry, de 21 años, que venía de ganar el premio Novato del Año en la temporada anterior, al terminar con 26 jonrones, 74 remolcadas y 19 estafas.
Gooden brilló en clase A avanzada en 1983, donde tuvo récord de 19-4, 10 juegos completos, 6 blanqueadas y efectividad de 2.60. En 191 entradas permitió 121 hits y ponchó a 300 bateadores.
La publicidad que estaban recibiendo los Metros era enorme y provocó los celos de George Steinbrenner, dueño de los Yankees, quien a su vez anunció que su organización también tenía sus dos jóvenes superestrellas, los dominicanos José Rijo y Stanley Javier. Rijo, de 19 años, había realizado un trabajo extraordinario en las menores en 1983, lo mismo que Gooden. Entre clase A y doble A, el derecho criollo tuvo marca de 18-7, promedio de carreras limpias de 1.88, con15 juegos completos y 4 blanqueadas. En 200.2 episodios aceptó 160 hits y 42 carreras limpias, con 184 ponches. Javier, de 20 años, excelente patrullero defensivo y bateador ambidextro, igualmente agotó una buena faena ese mismo año. En clase A bateó .311, al conectar 152 hits en 489 turnos, incluyendo 34 dobles, 6 triples y 12 cuadrangulares, produjo 77 carreras, anotó 109, con un OBP de .403.
Pero el plan de Steinbrenner no funcionó, pues tanto Rijo como Javier enseñaron que aún no estaban listos para accionar en las mayores. En 1984, Rijo compiló foja de 2-8 y efectividad de 4.76, en 24 partidos, 5 como abridor, y Javier únicamente participó en 7 encuentros y bateó de 7-1. Ambos fueron remitidos a las ligas menores, tras un tiempo con el equipo grande. En cambio, Gooden finalizó con récord de 17-9 y efectividad de 2.60, con 7 juegos completos, 3 lechadas y 276 ponches, y ganó el premio Novato del Año. Strawberry registró 97 vueltas empujadas y 75 anotadas, con 26 jonrones, 27 dobles y 27 robos. Steinbrenner reaccionó enviando a Rijo y Javier a Oakland el 5 de diciembre de 1984, junto a los lanzadores Tim Birtsas, Jay Howell y Eric Plunk, a cambio del jardinero Rickey Henderson, el pitcher Bert Bradley y dinero en efectivo.