PRIMER ROUND
El corazón de Geovanni ¿Cuánto vale?
Si el coraje o valentía de un púgil se resume en el valor de su corazón, me gustaría saber con exactitud cuánto vale el del número---- del mundo del peso medio FIB, Giovanni Lorenzo. Yo tengo una respuesta contundente en lo personal, creo que tiene el mismo valor que en sus años de aficionado, cuando era un estelar de la selección nacional y representó al país con dignidad por los cinco continentes. Creo en su gran valor cuando ya mucha gente no cree en él y no le augura éxito para su pelea mundialista en Alemania el próximo 19. Giovanni (27-1, 19 KOs.) es uno de los peleadores con más talento que ha tenido el país en los pesos altos, pero tuvo un tropiezo mental, sí, fue un error síquico no arriesgarlo todo ante un hombre como el ex campeón Raúl Márquez, quien venía de dos años de retiro solo a ganarse unos centavos, Lorenzo se replegó pensando que tenía su pleito ganado, no brindó lo que acostumbraba y fue sorprendido con su primera derrota. Sufrió, lloró, pagó caro su error, pero aprendió… y es lo que debe aplicar ahora, con la faja mundial en juego: darlo todo ahí, o perder por toda la cuenta ante el alemán Sebastian Sylvestre (31-3, 15 KOs.) o ganar ese cetro por nocaut y juntarse con Elio Rojas en el firmamento de las estrellas. Debe quedar con la satisfacción de darlo todo esa noche y los resultados se verán. Ahí está su futuro y el de su familia, si deja ir este chance le será muy difícil encontrar otro igual. Sylvestre es un buen peleador, pero jamás parecido al campeón renunciante Arthur Abraham, un armenio sin mucha elegancia, pero que a base de agallas hizo un reinado de 10 defensas exitosas previo a subir a los supermedios exactamente cuando le tocaba pelear con Lorenzo; ante Abraham las posibilidades eran mucho menores, ahora se abren positivamente a su favor. Reitero, le será difícil encontrar otro chance mejor y claro, mostrar que su reloj interno no falla a la hora de la verdad. Payano, Díaz y Nolasco… No creo en cábalas ni en fórmula que lleven a un peleador al éxito tomando viejas experiencias de otros compatriotas. Previo a Beijing hicimos un paralelo de lo que había sido la carrera de Pedro Julio Nolasco, nuestro primer medallista olímpico, y lo parecido que había sido con la de Félix Díaz con relación a las malas decisiones que se les daban en los grandes eventos. Nolasco era muy dado a recibir decisiones desfavorables, localistas, como fueron las de San Juan´79, ante Alberto Mercado, y en Caracas´83 frente a Manuel Vilchez, en ambos casos le robaron el oro panamericano al nuestro. Más tarde, en el mundial de Chicago, clasificatorio para Beijing, Díaz fue descalificado con un empate, en el siguiente perdió de un cubano por un punto, mientras el público protestaba el veredicto de los jueces… Ante ese panorama de “mala suerte” Nolasco se convirtió en el primer medallista olímpico dominicano, y posteriormente Félix Díaz en el primer oro olímpico del boxeo dominicano. ¿A ustedes no les parece que el caso de Juan Carlos Payano guarda también similitud con lo anterior con estos casos de perder peleas injustamente como ésta del mundial de Italia, donde la votación oficial terminó empate?La acumulada a nivel general de la computadora también empate, y finalmente, los jueces votaron con un punto para el ganador y quedó 3-2 en su contra. Pasó el tailandés y él se quedó. Ojalá no le esté pasando por la cabeza el profesionalismo a Payano, creo que él puede darse un último chance hasta Londres 2012 o por lo menos hasta los panamericanos venideros. Reino efímero Un buen relevo se dio durante el fin de semana, al menos la faja supermosca de la OMB pasó d manos de uno de los campeones más viejos de actualidad a uno de los más jóvenes. José –Carita- López, quien acaba de pasar como un rey efímero al perder en la primera defensa la corona, recibió una lección de boxeo, con caída y todo en el cuarto asalto, de parte del jovencito filipino Marvin Sonsana, quien tiene 19 años, el destronado monarca tiene 37, casi le duplica la edad. La votación fue unánime a favor de Sonsana, quien de paso es el filipino de menor edad en ganar una corona del mundo. Carita López había sembrado un hito en marzo pasado cuando se coronó en su sexto intento, pero el empuje de la juventud de Sonsana fue demasiado para él. Es bueno recordar que el hombre más joven en ganar un cetro es Wilfredo Benítez, de Puerto Rico, cuando derrotó a Pambelé cuando contaba con 17 años. Y el más viejo en lograrlo ha sido George Foreman a los 43. En lo que respecta al boxeo dominicano los más jóvenes en ganar cetros fueron César –Patico- Polanco y Julio Gervacio, ambos al igual que el filipino Sonsana, con 19 años de edad. El más viejo fue Luis –Cucuso- Santana, con 36 años.