La criminalidad haitiana aquí es ya intolerable
La participación de haitianos en actos delictivos va en aumento, año tras año, en nuestro país.
Los homicidios y atracos en los que se ven involucrados reflejan que estamos ante un problema de múltiples dimensiones.
Un problema que afecta sensiblemente la seguridad y convivencia social en el país.
Un factor agravante en este panorama es la facilidad con la que estos individuos logran evadir la justicia, debido a la carencia de documentos de identidad confiables.
Esto dificulta el seguimiento de los casos, la identificación de responsables y la posibilidad de descargar sobre ellos todo el peso de las leyes.
Los delincuentes haitianos se han convertido en el grupo extranjero más numeroso dentro de la población penitenciaria dominicana, un dato verdaderamente alarmante.
El deterioro de la seguridad en Haití, donde las pandillas han tomado control de amplias zonas de ese país, ha impulsado a muchos delincuentes a cruzar hacia acá en busca de refugio o nuevas oportunidades delictivas.
En 2024, las estadísticas fueron contundentes: ocurrieron 212 homicidios entre nacionales haitianos en territorio dominicano.
Estos casos representan aproximadamente el 16.4% de la tasa de homicidios acumulada en el país.
Un patrón recurrente en estos delitos es el uso de armas blancas, presentes en el 49.6% de los homicidios perpetrados por haitianos.
Este tipo de violencia no solo genera temor entre la población, sino que también subraya la necesidad de abordar con mayor rigor el control de armas y la regulación de quienes ingresan al territorio dominicano.
Las autoridades dominicanas deben de actuar ya con firmeza y responsabilidad ante este desafío.