Condenados a una vida de amarguras
De los 90,000 habitantes de La Caleta, un número significativo lo componen adultos mayores pobres que ni siquiera tienen con qué comprar medicinas.
Además de las precariedades que soportan por ser envejecientes y desvalidos, tienen que enfrentar diariamente la falta de servicios esenciales, lo que los condena a una vida de amarguras.
A pesar de los esfuerzos comunitarios y las reiteradas solicitudes, estos envejecientes carecen de centros de acogida que les brinden atención médica, alimentación adecuada y espacios de recreación.
Durante los encuentros de “Listín en el Barrio”, los líderes comunitarios han expresado su preocupación por la ausencia de instalaciones dedicadas al cuidado de los adultos mayores.
Pero la experiencia ha demostrado que, tras conocer estas demandas en otros barrios donde el Listín ha celebrado estos encuentros, el Consejo Nacional de Apoyo a los Envejecientes (CONAPE) ha respondido positivamente.
De ese modo, hemos logrado (tanto el Listín como el barrio del que se trate) que se establezcan centros de acogida en ellos, beneficiando a centenares de personas.
En tal virtud, hacemos un nuevo llamado al CONAPE para que extienda su apoyo a La Caleta, garantizando que sus envejecientes reciban el cuidado y la dignidad que merecen.
El Consejo de Desarrollo Comunitario de La Caleta ha hecho esta solicitud anteriormente, pero no ha sido atendida.
Urge, entonces, que el CONAPE considere la densidad poblacional y la extensión del distrito municipal para que abra estos centros en las diferentes secciones y parajes, asegurando así que todos los envejecientes se beneficien.
Otra queja de los comunitarios es que el programa “Senasa cuida de ti”, dirigido a adultos mayores de 65 años, ha dejado de suministrar suplementos nutricionales y medicamentos esenciales en los últimos dos meses.
Esta interrupción ha afectado a una población de más de 4,000 adultos mayores con enfermedades crónicas, quienes dependen de estos insumos para mantener su salud.
Es imperativo que las autoridades competentes respondan a estas necesidades urgentes.
Es responsabilidad del Estado asegurar que quienes han contribuido al desarrollo de nuestra sociedad disfruten de una vejez digna y segura.
La comunidad de La Caleta espera con esperanza que sus voces sean escuchadas y que se tomen acciones concretas para atender las necesidades de sus adultos mayores.
El Listín también.
