EDITORIAL

Don Alejandro E. Grullón E.

Trabajar mucho y ser generoso fue la divisa de vida de don Alejandro E. Grullón E., pionero de la banca privada dominicana y pilar de la construcción democrática del país.

Al morir ayer, a los 91 años, deja una enorme estela de contribuciones al desarrollo nacional como impulsor de instituciones que abrieron la vía de la modernidad, tras la oscura era de la dictadura trujillista.

Bajo la sombrilla de la Asociación para el Desarrollo, que fundó junto a otros jóvenes visionarios, se crearon el Banco Popular Dominicano, la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos, el Instituto Superior de Agricultura, la Compañía Financiera para el Desarrollo, la Universidad Católica Madre y Maestra y el programa Acción Pro-Educación y Cultura (APEC).

Fue un gran mecenas del humanismo.

Estimuló y apoyó a entidades dedicadas a labores sociales, educativas, culturales y religiosas; apadrinó escuelas y asilos, fue creador y primer presidente del Plan Sierra para la protección de la foresta en el Cibao.

También fue el presidente del Patronato de la Basílica de Higu¨ey, creador del Panteón de los Obispos Dominicanos y del Museo Religioso de esa catedral.

Fiel creyente en la democracia, impulsó la Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) como un músculo de refuerzo a los procesos de transparencia institucional y mantuvo estrechas relaciones con el liderazgo político y empresarial, procurando soluciones y acuerdos en medio de conflictos y controversias de gran envergadura.

De trato afable, vida sencilla, hombre sensible a las necesidades de los pobres, su labor de altruismo la conocieron los beneficiarios de sus ayudas y unos pocos allegados.

A su hoy viuda, Melba Segura de Grullón, le brindó todo el apoyo necesario para crear la Fundación Sur Futuro, una de las más relevantes instituciones sociales del país.

Esta promisoria trayectoria de don Alejandro E. Grullón E. lo convirtió en uno de los más conspicuos ciudadanos dominicanos. Su muerte enluta a la sociedad que hoy lo despide con el mejor de los honores: el de la gratitud y reconocimiento a estos servicios.

LISTÍN DIARIO trasmite sus más sentidas condolencias a su hoy viuda, Melba, a sus hijos Manuel Alejandro, Virginia, Eduardo y Alexandra, y al resto de sus familiares en esta hora de duelo.

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