Reguladores de bolsa necesitan autonomía

El mercado de valores de República Dominicana recibió tres recomendaciones estratégicas para emprender su crecimiento y desarrollo, tales como una reforma de las normas alusivas a la post-contratación de los instrumentos financieros, un fortalecimiento de los principios de gobierno corporativo a exigírsele a las empresas cotizantes y un mayor espacio de autonomía para el regulador de estas dinámicas de intermediación.

Tal como lo dijo Elvira Rodríguez Herrer, presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de España, al ofrecer la conferencia “Elementos para el Crecimiento de los Mercados de Capitales”, ofrecida ayer en el Salón Salomé Ureña de Henríquez del Banco Central de la República Dominicana, como apertura de la Cumbre Internacional del Mercado de Valores, organizada por la Superintendencia de Valores de República Dominicana (SIV).

“Estos principios están incorporados en el proyecto de reforma a la Ley del Mercado de Valores, que reposa en el Congreso de la República, la cual traerá mayor transparencia y agilidad a la plataforma, propiciando un crecimiento a un paso todavía más acelerado”, expresó Gabriel Castro, superintendente de Valores dominicano, al tiempo de recalcar que uno de los objetivos de la Cumbre es demostrar la manera en la que otros países tuvieron éxito con las reformas que se plantean en el país.

Castro expresó que el sector bajo su regulación se encuentra en un buen momento, porque, por ejemplo, las cuentas abiertas en el Depósito Centralizado de Valores (Cevaldom) crecieron de 41,000 al cierre de diciembre de 2015, hasta 50,000 en aproximado para finales de abril de 2016 o un salto de 21%. Número relacionado también al nivel de expansión de 16% que el funcionario estima experimentará esta actividad financiera para el 31 de diciembre de 2016. “Y una ley más moderna mejoraría esas cifras”.

A la Cumbre se dan cita las autoridades del mercado de valores de Perú, Panamá, Paraguay, Uruguay y Costa Rica, aparte de la representante de España, quien destacó el desafío de cualquier regulador, en cualquier parte del mundo, fomentar actividades económicas ágiles, al mismo tiempo que aplicar una vigilancia que evite inconvenientes.

“Como supervisores, en la CNMV tuvimos que aplicar algunos cambios, como el funcionamiento con mayor flexibilidad y más rápidos tiempos de respuesta, adoptar una filosofía de regulación preventiva, en adición a convertir al mercado de valores en un cauce atractivo de recursos, donde las empresas quieran ir, porque es mejor y más fácil”, declaró la presidenta del organismo supervisor español.