De reojo
Salir a la calle se ha convertido es ya un doble dolor de cabeza. A los acostumbrados tapones en determinadas horas del día, se suma el trauma de encontrarse con los semáforos apagados, lo que perjudica doblemente el tránsito en las principales calles y avenidas de la capital. La situación ha vuelto ha presentarse luego de que hace algunos meses LISTÍN DIARIO denunciara el problema, pero al parecer los semáforos defectuosos ya se dañaron. La otra explicación puede estar en los cortes de energía eléctrica, que se producen con cierta regularidad, aunque cualquiera que sea la causa el problema debería ser solucionado cuanto antes.