La tragedia del 14 de agosto le dejó una marca nunca podrá borrar
Desde horas de la mañana de ese lunes, el ambiente estuvo tenso, con un aire caliente y sin energía eléctrica, por lo que se mantuvo sentada en la acera del negocio donde trabaja en la calle Jesús de Galíndez, en San Cristóbal.