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GRANDES CLASICOS DEL CINE

El gran dictador

En esta película Charles Chaplin interpreta a dos personajes: uno es un barbero de origen judío que sufre un accidente durante la Primera Guerra Mundial. El otro personaje es al dictador Hynkel, un fiel retrato del Fuhrer.

La sátira es un recurso que podemos encontrarla en el arte, y en muchos otros escenarios para atacar a la realidad utilizando un arma poderosa: La Inteligencia. Esta ironía o sarcasmo para ridiculizar a un personaje fue lo que motivó a Charles Chaplin de jugar con la diversión; pero con un ataque frontal cargado de humor sobre este siniestro personaje del siglo XX como Adolph Hitler en la película “El Gran Dictador” del año 1940 recién comenzando la Segunda Guerra Mundial.

En esta película Charles Chaplin interpreta a dos personajes: uno es un barbero de origen judío que sufre un accidente durante la Primera Guerra Mundial, por el cual dura en un sanatorio 20 años aquejados de una amnesia. Un día recobra la conciencia, y como si nada, abre su nueva barbería en un ambiente hostil hacia los judíos; por lo que no es consciente del cambio drástico que ha tenido su país durante su letargo. El otro personaje que interpreta es al dictador Hynkel, un fiel retrato del Fuhrer; pero con aires de parodia.

Un día el déspota Hynkel necesita financiar la invasión al vecino país por lo que ordena el cese a la persecución judía; porque necesitaba que un banquero judío le otorgara el préstamo. Cuando el banquero le niega dicho financiamiento ordena la violencia contra los judíos, y nuestro querido barbero junto con su amiga Hannah (Paulette Goddard) son arrestados. Mientras se encuentran en el guetto, logran fugarse y por casualidades del destino nuestro barbero judío es confundido por el dictador Hynkel, y este último, con el barbero, lo que logra intercambiarse los roles otorgándole a Chaplin el placer de satirizar y de ridiculizar a los personajes en cuestión.

Este cruce de identidades determinará el destino de la invasión que tenía Hynkel (Hitler) junto con su aliado Benzino Napaloni (Mussolini) al vecino país, llegando nuestro barbero dar un discurso frustrando el avance expansionista de ambos dictadores.

La genialidad de Chaplin de jugar con las escenas es antológica si nos ponemos a observar la simbología que quiere presentarnos. Una de ellas es cuando el afamado dictador juega con el globo terráqueo donde lo lanza hacia arriba, lo golpea con los glúteos, lo atrapa con un dedo, es decir, juega con él como si estuviera jugando con el mundo entero. Sin embargo, cuando intenta de seguir dominando el globo, lo lanza de nuevo hacia arriba y acaba explotándose. Este momento quiere significarnos que una persona o gobernante nunca podrá dominar el mundo porque terminará explotándose. Será su fracaso como ha sido con otros dictadores de querer dominarlo.

La puesta en escena en sentido general es excelente, por parte de Chaplin que ha sido uno de los exponentes más perfecto para el desarrollo de la industria cinematográfica. “El gran dictador” es una película aleccionadora y optimista, ya que en la parte final de la misma, es cuando dice el famoso discurso hacia el pueblo cargado de mucha energía positiva y de enseñanza.

“El gran dictador” es una obra que se mofa de las ambiciones totalitarias y fascistas. En fin, es digno ver esta obra maestra del cine para valorar en su justa dimensión no solamente al hombre que hace reír, sino al hombre serio y el drama con un contenido de ideas progresistas.

Curiosidades

(Algunas fueron tomadas de la página curiosidadesdecine.com)

1) Durante una fiesta en Beverly Hills, en 1935, Chaplin observó con desagrado que entre los invitados había unos alemanes que ostentaban orgullosamente insignias nazis sobre las solapas de sus trajes. Uno de ellos se acercó al cineasta para pedirle un autógrafo, a lo que éste se negó. El alemán le preguntó contrariado, "¿Qué tiene usted contra nosotros?", a lo que contestó rápidamente "¿Qué tienen ustedes contra todo el mundo?". Según cuenta el propio Chaplin en su autobiografía, aquel incidente, junto con las pésimas noticias que le llegaban de Europa, le decidieron a preparar una comedia anti-nazi que acabaría convirtiéndose en "El Gran Dictador".

2) Se dice que, a pesar de estar prohibida en la Europa ocupada por los nazis, Adolf Hitler se hizo traer una copia para verla en privado. No la vio una vez, sino dos. No ha transcendido su opinión sobre la película. Cuando Chaplin supo la historia, afirmó que "hubiera dado cualquier cosa, cualquiera, por saber lo que dijo Hitler cuando la vio..."

3) Según declaraciones de Charlie Chaplin años después del estreno, si hubiera sabido la terrible tragedia que fue de verdad la II Guerra Mundial y la crueldad con que los nazis aplicaron sus brutales teorías racistas, jamás hubiera hecho una comedia como "El Gran Dictador" sobre ese tema.

4) Por su doble interpretación en "El Gran Dictador", Charles Chaplin obtuvo su primera y única nominación para el Oscar al mejor actor.

5) Es la primera película hablada que dirigió Charles Chaplin.

6) La película estuvo prohibida en España hasta 1975. En Alemania lo estuvo hasta 1998, e hizo una recaudación increíble para un film tan viejo. En Italia no pudieron verla completa hasta 2002.

Ficha Técnica:

Calificación: 5/5 (Excelente)

Nombre Original: The Great Dictator

Año: 1940

Duración: 125 minutos

Del director Charles Chaplin: Considerado uno de los fundadores del cine en todas sus facetas.

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