Mijail Tal: El genio de Riga

En los quince siglos de historia del ajedrez algunos trebejistas privilegiados se han destacado por encima de la super élite mundial y entre ellos tenemos los ejemplos de Paul Morphy, Mijail Botvinnik, José Raúl Capablanca, Robert Bobby Fischer y Gary Kasparov. En la actualidad Magnus Carlsen es el fenómeno que las presentes generaciones admiran mayormente.

Pero también existió un jugador que por su estilo, carisma y resultados, es considerado grande entre los grandes, el llamado “Genio de Riga”: Mijail Nejémievich Tal, (Riga, Letonia, 9 de noviembre de 1936 – Moscú, Rusia 28 de junio de 1992) Campeón Mundial en 1960, hasta ese momento el titular más joven con solo 23 años.

Se destacó desde muy joven por su gran capacidad para crear ataques y combinaciones sorprendentes y, a menudo, muy arriesgadas. Es considerado por algunos especialistas "el mejor atacante de la historia". Su particular y agresivo estilo, lo ha convertido en uno de los jugadores legendarios de la historia del ajedrez e indispensable de estudiar por los amantes del Juego Ciencia.

El genio de Riga nació en el seno de una familia judía; sus padres eran primos, y desde su nacimiento tuvo dos dedos menos en la mano derecha; eso no le impidió ser un buen pianista y graduarse de Literatura Rusa en 1958. Aprendió a jugar en la infancia viendo las partidas que jugaba su padre en el salón familiar; pero solo enfrentó, a los 17 años, a un gran maestro, su desarrollo ajedrecístico fue notable teniendo en cuenta, que solo seis años después sería Campeón del mundo derrotando a Mijail Botvinnik.

A finales de los años 50, diversas victorias le ayudaron a consolidarse en la cumbre: ganó el Campeonato Soviético en 1958, el Interzonal de Portoroz y finalmente, al coronarse campeón del torneo de Candidatos en 1959 (donde derrotó 4 x 0 a la estrella norteamericana, el joven Bobby Fischer) obtuvo el derecho a disputar el Campeonato del mundo en 1960.

Aunque perdió el match de revancha contra Botvinnik en 1961, su carrera fue maravillosa hasta sus últimos días siendo un constante triunfador en eventos internacionales. Entre ellos, se cuenta la racha de 83 partidas sin ser derrotado entre 1972 y 1973 (ganó 5 torneos consecutivos en ese período, incluyendo un campeonato soviético) y el primer puesto compartido con Anatoli Karpov en el "Torneo de las Estrellas" de Montreal 1979.

Mijail Tal consideró al ajedrez más un arte que una ciencia, y toda su vida fue un apasionado de las combinaciones, desarrollando un estilo audaz con mucha energía; en 1991 ganó el Torneo Memorial Najdorf en Buenos Aires y al año siguiente venció a Kasparov en el torneo de ajedrez relámpago de Moscú, muriendo un mes después a los 55 años de edad. Fue enterrado en el cementerio judío de Riga. Durante su vida, la salud fue su gran punto débil.

Frases famosas de Mijail Tal

"Tuve suerte porque 1960 fue bisiesto y pude ser campeón un día más. Pero eso no me preocupa, porque el título de campeón es provisional, mientras que el de excampeón es eterno".

"El ajedrez ocupa en mi vida un ciento por cien, más diez".

"Si prohibiesen el ajedrez, probablemente me haría contrabandista".

"El hombre acepta sin problemas que una máquina corra más que él. Pero, difícilmente aceptará, que piense mejor que él".

"Hay dos clases de sacrificios: los correctos y los míos".

"Un jugador de ajedrez es primordialmente un actor. Se sienta en el escenario preguntándose qué jugada le va a agradar más a la concurrencia".

A la pregunta: "¿Qué representó para usted el cálculo de sus probabilidades de victoria en el Torneo de Portoroz?", Mijail Tal respondió: "Para mí, el tablero de ajedrez es un campo de batalla y no los libros de un contable"

"Los aficionados al ajedrez y los lectores sólo son felices cuando un gran maestro se arriesga, más bien que cuando se limita a mover los trebejos".