Tres poemas de Virginia Sánchez Navarro
La autora, notable cineasta, escritora y dramaturga dominicana residente en los Estados Unidos somete a la consideración de los lectores de Ventana tres nuevos textos recientes.
Temporal
Eres como la arena
Pierdes las huellas...pierdes las huellas.
Arena ardiente que todos pisan,
A nadie quieres.
Viene la brisa, te da la vuelta: ya no recuerdas
Dónde miraste,
Por qué miraste,
Cómo se siente.
Arena viva,
Arena muerta que no lamentas.
Sobras de piedra.
Solo te tientan
Pisadas nuevas
Nota a un personaje olvidado
Cabeza en la pared. Cuerpo en la cama. Los pies, la fuerza al aire.
Queriendo no saber, mis ojos te encuentran mirándome desde ahí tirado en los innumerables papeles en los que te escribí. "Un día me olvidarás”, digo confiada, pero según lo digo ya la mente ha ido lejos a buscarte. Parece que soy yo quien no te deja. Al menos eso han dicho, pues es que aún no saben que el inventor, sin terminar, no tiene paz.
Ya he levantado el cuerpo, añadí más detalles a tu cara, te infundí nuevo olor. Ya he plantado las piernas. Recordé que tu risa debió ser corta y grave y dulce. Y de a poco las hojas se van desvaneciendo; el ojo de la mente se vuelve de papel. Te miro deslizarte por la calle; los dientes apretados por horrores que ideé. Nunca me he disculpado por ésta y tantas cosas, por haberte creado solo para caer. Tú sigues caminando. No sé si yo te ordeno, o si te sigo. No sé si estás al mando de tu propio final.
Y ahora ambos esperamos hasta que te recojan. Yo ansiosa por soltarte, tu ansioso por brillar. En todos los castigos que te impuse me he muerto, al ver que nadie llega; no te podré salvar.
Migaja
No te pido que me des
Lo que de por sí no tengo
Tú bien sabes que pretendo
Pero en el fondo lo sé
Nunca seré más que ayer
Por lo tanto no hay mañana
Solo dame un hoy constante
No sea que vaya a morir
Siendo las cosas así
¿Qué te cuesta darme aire,
Por no quitarme las ganas,
Por dejarme ser feliz?