Ajedrez y Fútbol
A propósito de la Copa Mundial - Qatar 2022
Cuando doy clases de ajedrez les señalo a los alumnos que el Juego Ciencia tiene mucha similitud con el Fútbol y les explico: hay que avanzar hasta llegar a la portería contraria para meter el Gol (Jaque Mate). Para eso utilizamos tácticas y estrategias que permitan ir dominando espacios (casillas) para colocar bien los jugadores (piezas) y organizar el ataque decisivo a la portería contraria que es el enroque.
En el ajedrez el balón lo toma inicialmente las piezas blancas (el Equipo blanco) que jugando 1.e4 en el centro del terreno trata de romper la defensa del Equipo negro, que puede utilizar une Defensa Siciliana, apoderarse del balón y contraatacar fuertemente por el centro y el flanco derecho del campo.
En realidad, es grande la semejanza entre el deporte del balón y las piernas con el juego del cerebro y el tablero. En los dos existe un campo de batalla con centro y laterales; en ambos, la habilidad para la toma de decisiones bajo un tiempo determinado es fundamental; hay que tener presente las 64 casillas en el Ajedrez y todo el terreno en el Fútbol y aunque el primero se juega de forma individual y el segundo en equipo, la verdad es que nuestras 16 piezas conforman un equipo dirigido por un director técnico.
Para hacer el Gol / Jaque Mate sabemos que se utiliza, además de tácticas y estrategias, otros aspectos técnicos y psicológicos que acentúan la similitud entre estos dos deportes. Por ejemplo, los penales se pueden relacionar con un ataque directo al rey; un gol sorpresivo desde lo profundo con un Jaque a la descubierta y un saque de esquina en el Fútbol puede ser una Apertura Inglesa, que sabemos, se inicia en el flanco de la dama.
Asimismo, un equipo con una defensa férrea puede compararse con el excampeón mundial Tigran Petrosian. Pero si es un equipo agresivo desde el comienzo, nos hace recordar al extraordinario Alexander Alekhine.
El factor tiempo también es importante en los dos deportes y a medida que avanza el reloj, en ambos casos la precisión y la exactitud para mover las piezas y los jugadores puede ser decisiva, mucho más, si el juego está muy reñido y un gol en el Fútbol, o una ventaja material en el Ajedrez, decide la partida justo faltando poco tiempo.
Existen similitudes de otra índole; las formidables actuaciones de Robert –Bobby- Fischer en los años 70, se pueden comparar a las del equipo de Brasil que ganó brillantemente la Copa Mundial de 1970 –tal vez el mejor equipo de Fútbol que ha existido y con un extraordinario jugador como Pelé en su nómina-, o que el juego de la Naranja Mecánica holandesa del mundial de 1974 se asemejaba al Ajedrez total de Gary Kasparov.
En la actualidad se puede comparar el juego del Campeón Mundial Magnus Carlsen con el accionar del portugués Cristiano Ronaldo, ambos considerados de la super élite en sus respectivos deportes, así como el dominio del balón y la velocidad de aceleración de Lionel Messi con la facilidad de J. R. Capablanca para orientarse rápidamente en cualquier posición durante una partida de Ajedrez.
En fin, aunque no soy un especialista del Fútbol, sí encuentro semejanzas entre los dos deportes y al brindar una clase comparando las dos disciplinas deportivas, ésta se hace más amena y ayuda a la mejor comprensión de la misma.