Receta para un desastre moral
“La naranja mecánica” (1971) es un clásico del nuevo cine criminal, y del género de la comedia negra, género donde se desplaza más por sus situaciones vulgares y excesos que por sus insultos. Esta es considerada una obra maestra de Stanley Kubrick.
El filme abre con una toma larga y un primer plano del protagonista, que se aleja hasta convertirse en lo que metafóricamente podría denominarse un “cuadro viviente”. Esta es una de las muchas extensiones fotográficas de “La naranja mecánica”, una que predice lo que será el filme: un viaje a la locura y una “redención” lenta y dolorosa.
La adaptación de la novela homónima trata la vida del joven Alex, un criminal de banda juvenil que es llevado a la cárcel y se somete a un tratamiento psiquiátrico experimental que bien podría llamársele tortura. La “técnica Ludovico”, como se le conoce a este condicionamiento ahora arraigado en la cultura popular, es apenas la punta del iceberg. Lo que más dificultó, pero a la vez conmovió de todo el filme, fue la inestabilidad emocional y moral de Alex quien, si bien es odiable en el principio, da lástima por haberse convertido en una víctima más de la corrupción política de su distopía.
Kubrick logró dominar la historia original de Anthony Burgess, a la vez que le dio toques de humor negro y una carga sexual y violenta muy controversial en una época donde las clasificaciones de películas apenas habían dejado los pañales.
Mejor todavía, este filme presenta dilemas morales que si bien podrían resolverse de forma sencilla a través de un sentido de moral religioso, uno se da cuenta de que tienen demasiadas aristas. Es ahí cuando el filme se convierte en un experimento de cine literario, que muestra los diversos rostros de la moral, demostrando que no existe el bien y el mal: solo existe una escala de valores grises entre ellos.
A través de un sufrimiento incomparable, Alex se enfrenta a sí mismo, cuestionándose la condición moral del ser: quien niegue su lado más oscuro, no sabría decir si se trata o no de un ser íntegro con su propia personalidad.
Ficha técnica
Título original: A Clockwork Orange; Duración: 137 min.; País: Reino Unido; Dirección: Stanley Kubrick; Música: Wendy Carlos; Fotografía: John Alcott; Reparto: Malcolm McDowell, Patrick Magee, Michael Bates, …; Productora: Warner Bros., Hawk Films; Sinopsis: Gran Bretaña, en un futuro indeterminado, Alex (Malcolm McDowell) es un joven muy agresivo que tiene dos pasiones: la violencia desaforada y Beethoven. Es el jefe de la banda de los Drugos, que dan rienda suelta a sus instintos salvajes apaleando, violando y aterrorizando a la población. Cuando esa escalada de terror llega hasta el asesinato, Alex es detenido y, en prisión, se someterá a una innovadora experiencia de reeducación que pretende anular cualquier atisbo de conducta antisocial. (FILMAFFINITY).