El clérigo ajedrecista

Ruy López (Zafra, Badajoz, c. 1530-Lima, Perú, c. 1590) fue clérigo de la parroquia de la Candelaria en Zafra y llegó a ser confesor y consejero real en la corte de Felipe II, soberano de España, Las Indias, Italia y los Países Bajos. Desde joven fue un enamorado del ajedrez influenciado por el portugués Pedro Damiano, quien había publicado el libro “Questo libro e da imparare giuocare a scacchi”, alrededor del año 1512. La facilidad del clérigo para jugar ajedrez le proporcionó reconocimiento internacional.

En 1560 durante su estancia en Roma por razones eclesiásticas, Ruy López, por entonces el mejor jugador de España, derrotó a los más fuertes jugadores italianos- considerados entre los mejores del mundo-. Estando en la Ciudad Eterna, conoció el libro de Damiano, que ejercía gran influencia entre los ajedrecistas de esa época y anunció que escribiría su propia obra para demostrar algunos falsos conceptos expuestos por Damiano.

Meses después, a su regreso a España. Ruy López de Segura publicó su obra “Libro de la invención liberal y arte del juego de ajedrez” con consejos generales, recopilación de aperturas y críticas a las partidas comentadas por Damiano en su libro.

En su obra, Ruy López analiza extensamente la apertura 1.e4 e5, 2.Cf3 Cc6, 3. Ab5, que se había estudiado en el Manuscrito de Gottingen en 1490 y en el libro de Luis Ramírez de Lucena, ajedrecista español que escribió el Tratado de ajedrez impreso más antiguo que se conserva, “Repetición de amores y arte de ajedrez”, publicado en Salamanca en 1497. Sin embargo, el clérigo ajedrecista da a conocer el gran valor teórico de esa Apertura, por cuyo motivo, desde entonces hasta nuestros días a la misma se le denominó Apertura Española o Apertura Ruy López, un arma muy utilizada por jugadores de todos los niveles, incluyendo a los Campeones del mundo.

Muchos historiadores del ajedrez consideran a López de Segura como el primer Campeón del mundo y como creador de la teoría del ajedrez. También es destacable que practicó con éxito la modalidad del ajedrez a la ciega. El rey Felipe II le colmó de honores por su fama en el ajedrez y en 1575 organizó un torneo en su corte y así se reunieron en El Escorial los dos mejores ajedrecistas italianos de su época: Leonardo da Cutri y Paolo Boi, junto con los españoles Ruy López y Alfonso Cerón. Esta prueba es calificada por los historiadores como el primer Torneo Internacional de Maestros. El torneo lo ganó da Cutri, quien recibió como premio mil ducados, una capa de armiño y en su lugar de nacimiento estuvo exento de pagar tributos durante veinte años