Intercambio
Una experiencia cultural
Cada persona trae su historia a cuestas, construida por experiencias y entorno social. Aquí contamos las vivencias de los miembros de la delegación dominicana que viajó a Japón a participar de Programa Internacional de Intercambio y Desarrollo de Juventud (INDEX 2015), el programa de intercambio cultural de la nación del Sol Naciente, relatar con qué se quedan luego de 18 días en suelo asiático.
Anthony Tejada El hecho de ser parte de INDEX 2015 permitió que mi visión ante el mundo cambiara por completo.
Japón es, sin lugar a dudas, el país donde la disciplina y la organización toman un protagonismo significante, esto demostrado tanto en el comportamiento de los mismos ciudadanos japoneses, como en el funcionamiento del país.
Esta experiencia ha significado mucho para mí, ha sido de gran aporte a la parte personal, pues la convivencia y los lazos de amistad que allí se hacen con personas de otras culturas, es uno de los principales valores agregados que el programa brinda. Además, por otro lado el aporte profesional y académico, es para mí una de las grandes enseñanzas que podemos conservar para toda una vida. Compartir y discutir sobre problemas actuales en 6 países con funcionamientos totalmente diferentes, es una gran oportunidad de crecimiento no solo para los que participamos, sino también para nuestra nación.
Danae Peguero Cuando me preguntaron sobre qué deseaba conocer en Japón, mi respuesta siempre pendulaba en términos de luz; la producción literaria de Kawabata y el manejo espacial de Tadao Ando me habían permitido imaginarla. Este elemento sutil, pero trascendente, a juicio personal, es el desarrollado con mayor gracia por los autores japoneses.
Japón se encuentra a dieciséis horas en avión de República Dominicana.
Es un viaje largo, pero necesario; lo cual implica la adaptación de sentidos y procesos mentales.
Es un lugar que está lejos en términos de distancia; pero su verdadera lejanía reside en términos de espacio-tiempo. En Japón todo es imaginable; en Japón todo es posible, desde la atmósfera mística que crea la luz, mientras alimentaba venados en el parque de Nara; hasta la exactitud estructural del Sky Tree en Tokio. Japón está fuera de este mundo, y aun así, se sintió como en casa.
Domingo A. Melenciano. INDEX ha sido uno de los programas más integrales de los que he participado. Tener la oportunidad de debatir sobre problemáticas globales y escuchar la opinión de jóvenes de 5 países diferentes, es simplemente enriquecedor.
Compartir, conocer, viajar, aprender, exponerse, hacer amigos, son solo algunas de las oportunidades que nos ofreció este programa.
Tener el privilegio de convivir con familias japonesas y evidenciar la cultura de primera mano, hacen de este intercambio una experiencia única e irrepetible. Definitivamente la mejor experiencia que he vivido.
Juan Eduardo Thomas Lo interesante de salir del país siempre será descubrir una nueva ciudad. Entender por la vivencia que hay miles de formas y maneras de hacer las cosas, y que cada una de ellas puede ser correcta.
Lo mejor es comprometerse para lograr en casa eso foráneo que admiraste.
Kaori Kasahara. Al darme cuenta de que ya el viaje no era un plan, sino una realidad, al ya estar en Japón, me di cuenta de que la experiencia sería mejor de lo que había imaginado… y así mismo fue.
Realmente las palabras nunca serán suficientes para poder explicar los sentimientos, las emociones y las enseñanzas con las que este viaje marcó mi vida. Desde la delegación dominicana a la que pertenecí, las personas que pude conocer como parte de un intercambio cultural, hasta los lugares y la comida que pude apreciar, todos y cada uno de ellos son ahora parte de lo que para mí ha sido un sueño hecho realidad. Si tuviera que volver el tiempo atrás, por nada en el mundo cambiaría esta experiencia de vida. Exhorto a todos los jóvenes que tengan la oportunidad a que apliquen a un maravilloso intercambio que no tiene desperdicios.
Mabel González Bencosme Visitar y conocer de cerca Japón significó comprobar lo que ya había leído o escuchado sobre la cultura nipona. Desde los distritos más transitados hasta los templos más antiguos y armoniosos pude percibir la manifestación de las más decentes y prudentes normas de convivencia, que parecen estar escritas en el certificado de nacimiento de los japoneses.
Verlos respetar el espacio del otro, al subir o bajar unas escaleras eléctricas, al tomar un ascensor, o simplemente al respetar el silencio y tranquilidad a los demás en el metro... en fin, una serie de comportamientos positivos que se replicaban de persona en persona. Visitar Japón y convivir de cerca con su gente y cultura ha aumentado mi sentimiento de admiración y respeto hacia ese espectacular país.
Marlyn Sánchez El primer aspecto que llamó mi atención al llegar a Japón fue cómo convive la naturaleza con la modernidad de las ciudades.
Es fácil ver amplias áreas verdes en medio de las maravillas arquitectónicas que caracterizan las zonas urbanas japonesas.
Otro aspecto, igualmente impresionante, es la disciplina de la población, empezando por la puntualidad hasta el cuidado de la ciudad por iniciativa individual.
Es evidente que la disciplina queda impresa en todos los actos de los japoneses; las reglas morales de la sociedad son el punto de partida de cada acción que estos emprenden.
La mayor riqueza que me queda de esta experiencia es la amistad construida con mis compañeros de delegación en INDEX 2015, y los amigos que ahora tengo en otros países. Luego de este intercambio tengo un mayor interés en contribuir a impulsar los cambios que necesita la sociedad dominicana.
Marycruz Garrido Japón: llegar con una actitud de sorpréndeme, y marcharse con el saber de que es un país maravilloso en todo el esplendor de la palabra, fue una experiencia de esas que te marcan la vida para siempre, de esas que te enseñan cómo mejorar día a día tu vida personal y profesional. El poder compartir con personas de 6 países con costumbres, cultura, y tantas cosas distintas a la nuestra, fue mágico.
Una de las cosas que más me impresionó fue la manera de ellos conservar sus templos (la forma de sus estructuras arquitectónicas), sus reservas naturales, su historia y cultura intactas a pesar de ser un país con las más altas tecnologías. El respeto, el orden y la higiene, valores que admiro por mantenerse día a día en cada ciudadano. Y qué decir de la gastronomía, una sensación placentera al paladar.
OPINIONES DE LOS PARTICIPANTES Michelle Ricardo A muchos, cuando se menciona Japón, lo primero que les llega a la cabeza son los electrónicos, el sushi o las artes marciales. En mi caso me llevo mi experiencia con las Artes, los haikus, la cerámica, el Butoh y, por supuesto, todo su arsenal pictográfico de milenios.
Sin embargo, de todo el viaje, lo que más me impresionó fue el sentido de respeto del pueblo nipón. Aquí destaco que esta experiencia ha cuestionado todo mi sentir sobre la noción del respeto. Ha sido muy triste descubrir la Isla después de esto.
El respeto por las pequeñas cosas y en las pequeñas cosas. Una muestra abierta y abismal de amor incondicional hacia el otro para conmigo. Sin lugar a dudas el respeto siempre es amor. Ojalá que la isla sea algún día motivo de todo nuestro amor.
Yasser Jordan República Dominicana ha sido elegida de manera consecutiva durante 13 años al Programa Internacional de Intercambio y Desarrollo de Juventud (INDEX), lo cual nos coloca como el país invitado de mayor cantidad de participación, pues siempre logran los jóvenes dominicanos destacarse por su capacidad y calidad en los cursos de discusiones. Este año la delegación dominicana logró destacarse por el alto nivel de conocimiento para el debate de los temas, pero también supo llevar lo mejor de nosotros: la alegría, el carisma y el liderazgo que como dominicanos nos caracteriza.
Hemos logrado el que siempre fue nuestro mayor compromiso: destacarnos por nuestra calidad, para que el próximo año la República Dominicana sea nuevamente elegida y que otros 10 jóvenes puedan tener esta gran oportunidad de participar en Japón de INDEX 2016.