LA NUEVA GENERACIÓN|
Las mujeres también tienen su espacio
ESCRITORAS CON DOS MANERAS DE VIDA : UNA EN EL PAÍS Y OTRA EN EL EXTRANJERO
Se supone que una página “rosa” trataría temas “lights”, quién sabe si una que otra bobada, pero en este caso no es así. Dos voces del llamado “sexo débil” expresan sus opiniones sobre la narrativa joven dominicana. Una desde México, Ariadna Vásquez y otra, Daniela Cruz, desde la ciudad corazón, Santiago. ¡Orale!Ariadna Vasquéz, reside en México desde el 2004. Esta periodista y escritora dominicana, que en el 2010 ganó el Premio de Cuento Joven de la Feria del Libro, decidió un buen dia salir de su patria y probar suerte en la tierra de los mariachis. Aunque todavía no se sabe si puede bailar una buena ranchera , de lo que si se puede estar seguro es que tiene capacidad para analizar la narrativa joven de República Dominicana , de la cual forma parte. Al preguntarle el porqué de que los jóvenes escriben más apegados a la realidad ,responde que tal vez se deba a que es difícil sustraerse del tráfico, las violaciones, el aborto, la tecnología, la violencia en general y el caos. “La ciudad siempre ha sido un tema en la literatura, pero en estos tiempos los escritores no pueden estar lejos de donde las cosas suceden. Esa manía de estar en contacto con todo de una manera virtual no puede obviarse, es algo mucho más vivo y que penetra en el consciente de los hombres de una manera muy difícil de entender, entonces algunos de nosotros somos Enkidu, queriendo volver a ese otro mundo al que ya no pertenecemos, muriendo en manos del gigante”, asegura. Un mundo virtualAriadna Vásquez piensa que la tecnología ya está aquí, vino, vio y venció: “¿Cómo puedes mantenerte completamente aislado de ella? supongo que afecta a los escritores, como también afecta a los veterinarios. Ya no puedes tener una clínica veterinaria sino tienes una página. ¿Dónde te va a encontrar la gente?, ¿quién diablos busca en las páginas amarillas? Ahora se guglea, no se busca información, ni se va a la biblioteca, para eso está Wikipedia y otras fuentes de información. Un escritor decente no necesita ahora una Olympia o una Olivetti, ni siquiera una computadora solamente, requiere de un blog, una página, Facebook, twiter, y todas esas cosas, además de, obviamente, un editor con un teléfono celular o un BB”. ¡Desde el Cibao para el mundo!Daniela Cruz, ganadora en el 2007 del premio de poesíade Alianza Cibaeña, forma parte del Sistema Nacional de Creadores Literarios (SINACREA) -un proyecto del Ministerio de Cultura en el que 12 jóvenes están becados para escribir un libro de los géneros teatro, novela, poesía y cuento. ¿Hoy día se escribe un realismo “sucio”?“Tal vez el calificativo de “sucio” le quepa a la sociedad en que vivimos y los procesos que pasamos. La literatura, que se sirve de la vida real de alguna manera, no se puede abstraer a ese fenómeno. Pienso que los jóvenes que escribimos ahora no tenemos un estilo particular que nos pueda abarcar a todos: cada quien va construyendo esa manera de decir conforme lo que lee, lo que escucha y lo que vive”, declara Cruz. ¿Generación?La escritora asegura que no se considera parte de una generación literaria, porque aquí no existe como tal eso ahora: “La última que tuvimos en la historia de la literatura dominicana fue la de los 80, que compartía maneras, temas, influencias. Nosotros, la llamada generación joven, compartirmos el espacio-tiempo, pero no por eso podemos llamarnos generación. Partiendo de eso, no somos pasivos, puede que no tengamos prisa ni nadie a quien quitarle puesto, por lo mismo de que no hay una generación previa de la cual romper. Y como dice Manuel Llibre Otero, “llegamos tarde a todas las luchas ideológicas” no hemos tenido que reinvindicar nada. Su tecnologíaTe permite leer y ser leído más fácilmente, es una democratización de la fase de publicación y del acceso a literatura extranjera y hasta local, sin tener que viajar. Pero a la vez te pone en riesgo, puede que la emoción de ver tus textos en la red te gane y publiques cualquier cosa, sin pasar por los filtros correspondientes. A dúoEs momento de preguntar a las dos escritoras que le regalarían a su país, Ariadna Vásquez dice que un estado laico. “Donde la iglesia y demás cultos religiosos no tuvieran ninguna influencia en el quehacer político y los problemas de salud se les llame problemas de salud, y no temas de consciencia religiosa y donde los problemas sociales y económicos se enfrenten con verdadera entereza política y no con miedo a las represalias de quienes hacen comercio con la fe”. Mientras que Daniela Cruz asegura que obsequiaría el gusto por la lectura: “Te hace viajar, aprender, soñar y consumes el tiempo en una actividad valiosa y gratificante”. Ping Pong Cada una tiene su opinión sobre la emigración de escritores, para Vasquéz dejar el país no es indispensable para desarrollarse como escritor. “En Dominicana no existen las oportunidades para que puedas buscártela en ese sentido, pero no es una condición irse como tampoco es una garantía de que si huyes podrás hacerlo. En toda Latinoamérica hay países donde es difícil escribir, y otros donde las oportunidades son mayores. México, para mí, es un país donde hay muchas oportunidades, pero para los mexicanos que conozco eso no es cierto. Aquí siempre se están quejando y yo quiero llorar cuando los escucho, porque Dominicana tiene aún muchas menos oportunidades para desarrollarte como escritor. En el caso de los dominicanos, siempre queremos irnos, porque existe la creencia de que en cualquier lugar se está mejor. Pero irse es difícil, conozco mucha gente en dominicana que ha tenido la oportunidad de irse y sigue allá, ¿por qué? No se sabe, hay muchas justificaciones pero el caso es que irse no es fácil, incluso hasta por el hecho de que los demás, cuando te vas, piensas que te tiene que ir bien, y es casi como si no tuvieras motivos para que te fuera mal”. Para Daniela Cruz tampoco existe la necesidad de emigrar asegura que hay que leer, escribir y publicar para desarrollar una carrera literaria. “Eso se hace aquí y en Vicente Noble. Ahora bien, hay cosas que se facilitan más en uno u otro mercado. Es cuestión de trabajar, desde donde se esté.”, afirma. Sobre la publicación de obras en el mercado internacional afirma que no cree que los dominicanos no se atrevan, al contrario, hay gente que lo hace: “Pero no es fácil, costear los gastos, agotar el proceso, con las limitaciones económicas que nos determinan. Además, presentar una obra implica que haya un público que la quiera consumir. Habría que crearle la necesidad al mercado editorial internacional de consumir literatura dominicana”. Al igual que Cruz , Vásquez considera que es difícil acceder al mercado internacional, sobre todo cuando las editoriales son un negocio, , que publican lo que saben que les traerá ganancias. “Si tú tienes un negocio publicando libros que venden porque el autor es conocido, ¿por qué aventurarse con un texto medio raro o distinto de algún morenito caribeño que se llama Brayan Gómez?”. PALABRAS EN ROSA POR MUJERES DE VALOR Daniela Cruz opina sobre la narrativa dominicana contemporánea que, independientemente de los jóvenes y mayores que la escriben, ha superado los esquemas rurales que la distinguían. “Ahora es una narrativa más urbana, ligada a las preocupaciones de la vida citadina, al egocentrismo que nos corrompe diariamente, a exagerar nuestros problemas personales”, asegura Cruz. Ariadna Vásquez se expresa con palabras certeras al afirmar que considera que el escritor puede escribir en las peores condiciones. “Ya la parte que le toca al mercado, es decir, la editorial, las ventas, esas cosas, son parte de otra historia y allí es donde las oportunidades (en el caso de República Dominicana) son escasas, donde es difícil moverte a menos que seas el mejor amigo del director de alguna editora. En ese caso, no tienes por qué irte, ¿no?”