La cultura en manos femeninas

SANTO DOMINGO.- La cultura agrupa todas las formas de expresión que caracterizan a una sociedad. Dentro de estas manifestaciones ocupan un importante lugar la música, la literatura, el cine, la radio, la televisión, la poesía y las artes escénicas y visuales. Todas forman parte de un fenómeno social que por el que se comunican los pueblos. “Ventana” se inicia en el periódico LISTIN DIARIO a mediados de los años 80 del pasado siglo XX, cuando Carmenchu Brussiloff inicia sus trabajos como editora de una sección que hoy conocemos como “La Vida”. En primera instancia, era un espacio llamado “Literatura Joven” que se publicaba los domingos. En él se ofrecía media página a poemas, relatos cortos, dibujos e ilustraciones de las más recientes promociones. “Ventana nació como un pequeño espacio para ofrecerle a la gente joven la oportunidad de expresarse y mostrar sus creaciones. Más que publicar escritos de grandes autores, lo que se buscaba era mostrar el talento joven”, afirmó Brussiloff. Los escritores de la época enviaban a la redacción del periódico las obras de sus pupilos y recomendaban la difusión de los más valiosos. Para los años de 1986 y 1987 ya existía una sección conocida como Ventana. “Esta parte surgió con la idea de crear un espacio propio, de abrir una ventana al mundo del arte. Un espacio donde pudieran expresarse escritores, pintores, músicos y artistas en general”, expresó Marta Madina, la primera editora de la sección con tal. Madina asegura que ese espacio permitía tratar el perfil del artista en cuestión así como definir la corriente que seguía, su estilo e influencias para realizar un análisis profundo de la obra. El suplemento Ejemplares del año 1989 dan testimonio de que para la fecha “Ventana, Artes y Letras” fue convertido en un suplemento de domingo dedicado íntegramente a la cultura. “Creo que fue un suplemento que complementaba perfectamente a las otras secciones del periódico donde se abordaba el arte o la pintura desde una perspectiva más noticiosa, o puntual en relación a la presentación de un libro o la inauguración de una exposición de arte. Ventana diluía las fronteras espacio-temporales que exigía el diarismo para permitirnos el lujo de preparar los temas con tiempo, mimarlos, y ser capaces de plasmar esa contemplación del arte desde una postura más reflexiva y, desde luego, más gratificante. Y los lectores supieron identificarse con ello”, agregó la periodista española Madina. Las portadas se caracterizaban por las ilustraciones e imágenes de gran tamaño que ocupaban la página casi com pleta, realizadas por el diseñador Yoni Cruz quien ha sido, a lo largo de la historia, su principal artista creativo. Tiempo después, Lilian Gil se queda a cargo del suplemento, más tarde, y sin seguir un orden cronológico, también fueron editoras de Ventana, entre otras, Marianne de Tolentino (quien asume su dirección dándole gran cobertura a las artes visuales, las letras y la cultura), Alanna Lockward y Ruth Herrera. Para el 2000, Zaida Corniel asume la edición de “Ventana” hasta finales del 2002. En esta etapa, el suplemento experimenta un rediseño gráfico y editorial que lo diferenció del trabajo anterior que fue atendido por Dionis Figueroa. En esa etapa, Ventana tuvo como sub-editora a la periodista Solange de la Cruz. Las ilustraciones de Kilia Llano, reconocida artista visual, también enriquecían la etapa femenina de Ventana. “Estas mujeres, cada una en su momento, fueron ejemplo de honestidad, inteligencia, energía, y talento. La participación de la mujer en la vida de Ventana ha sido preponderante, sobre todo si tomamos en cuenta la colaboración de intelectuales de la talla de Aida Cartagena Portalatín, doña Carmen Quidiello de Bosch, Chiqui Vicioso, María Ugarte, Jeannette Miller, Hilma Contreras y Julia Álvarez, entre otras muchas, han publicado sus poesías, sus críticas, sus ensayos, sus reflexiones y sus letras en las páginas de este suplemento”, estableció Yoni Cruz. Aída Bonelly de Díaz, Catana Pérez de Cuello, Carmen Heredia y Mónica Volonteri, entre muchas otras, fueron también notables colaboradoras de “Ventana” en sus primeras etapas.