Seguridad VIal
Cultura de responsabilidad vial = menos accidentes
La concienciación y educación vial emergen como herramientas fundamentales en la lucha contra la siniestralidad. la prevención no es solo una medida, es un compromiso de todos que nos permiten reducir riesgos y costos, y proteger vidas.
Cada día en el país accidentes de tránsito por diferentes factores, los cuales resultan en grandes pérdidas a los usuarios y al Estado.
La República Dominicana enfrenta una creciente problemática en relación con los accidentes de tránsito, con consecuencias que se extienden más allá de la pérdida de vidas y lesiones físicas; su impacto económico y social es significativo y, a menudo, pasado por alto.
En entrevistas con funcionarios encargados de la seguridad vial, se ha discutido la necesidad de un enfoque más integral para abordar este delicado tema.
El Servicio Nacional de Salud ha señalado que los accidentes de tránsito generan un gasto considerable, no solo para el sistema de salud, sino también para la economía en general.Estos accidentes implican altos costos en atención médica, servicios de emergencia y consecuencias laborales, declaró un representante de la institución. El senador Andrés Guillermo Lama, presidente de la Comisión de Transporte y Telecomunicaciones del Senado, apuntó que el impacto de los accidentes de tránsito, desvía recursos que podrían invertirse en educación, infraestructura y otros programas.
Ambos entrevistados coincidieron en la necesidad de mejorar la infraestructura vial, tanto en áreas urbanas como rurales. El senador Lama enfatizó la importancia de ampliar la iluminación pública y construir áreas seguras para peatones y ciclistas.
Además, sugirió implementar pasos peatonales elevados y semáforos inteligentes en las zonas de alta circulación. Desde la DIGESETT, se ha incrementado la presencia de agentes de tránsito en lugares críticos, aunque persiste el desafío de una infraestructura que no cumple con los estándares de seguridad necesarios.
Medidas a tomar
La concienciación y educación vial emergen como herramientas fundamentales en la lucha contra la siniestralidad.
La DIGESETT ha desarrollado programas que involucran charlas de educación vial en centros educativos y comunidades, y campañas como un casco para salvar tu vida. Es necesario generar un cambio cultural que fomente prácticas responsables en la conducción, señaló un portavoz de la DIGESETT.
Estas iniciativas son consideradas cruciales por el senador Lama, quien subrayó que promover una cultura vial responsable puede tener un impacto directo en la disminución de siniestros.
Los gastos médicos de las víctimas de accidentes suelen dejares grandes pérdidas.
La efectividad de la legislación existente también fue tema de debate. Aunque la Ley 63-17 es considerada completa, se admitió que no se aplica adecuadamente, lo que limita su eficacia. Hemos entregado un proyecto de modificación para enfrentar estos desafíos, mencionó un representante de DIGESETT en referencia a sus encuentros con la Cámara de Diputados para fortalecer las regulaciones actuales. Lama coincidió en que la falta de cumplimiento y fiscalización de las leyes es uno de los principales obstáculos a superar.
Ambos funcionarios destacaron las barreras culturales que obstaculizan la implementación de políticas efectivas en seguridad vial. La falta de respeto por las normativas y la educación insuficiente son obstáculos críticos.
La experiencia de quienes han sido testigos de accidentes también ofrece una perspectiva valiosa. Un testigo, que prefirió mantenerse en el anonimato, compartió que, aunque no ha sufrido consecuencias físicas directas, el apoyo psicológico fue esencial para enfrentar el trauma del accidente. Subrayó la importancia de conducir con precaución, recordando que los accidentes son situaciones que no podemos manejar.
En este contexto, el presidente de la Confederación Nacional del Transporte (CONATRA), Antonio Marte, destacó el impacto económico de los accidentes de tránsito en el presupuesto del Estado y en el sistema de salud pública, señalando que es muy negativo, ya que estos en nuestro país conllevan a muchos gastos hospitalarios, a mucha pérdida en el capital y muchas pérdidas de vidas.
Subrayó que la República Dominicana es el país que más accidentes de tránsito genera, y atribuyó esta situación a la falta de inversión en la educación vial.
Al no hacerse, se entiende erróneamente que todos los accidentes son culpa del transporte público. Esto es total y absolutamente errado, ya que más del 80% de los accidentes son causados por el transporte privado, afirmó Marte. También argumentó que, con la implementación de pruebas antidoping y alcoholemia, es fundamental que estas medidas también se apliquen al sector privado para reducir los accidentes.
La intersección de la seguridad vial, la economía y la salud pública es un área que requiere atención urgente. Para reducir los accidentes de tránsito en la República Dominicana, es esencial un enfoque integral que incluya mejoras en la infraestructura, educación vial adecuada y una legislación robusta y efectiva. Como sociedad, es fundamental abordar esta problemática, no solo para salvar vidas, sino para asegurar un futuro más seguro y próspero para todos.