LAS TELECOMUNICACIONES CONECTAN DESDE PERSONAS HASTA LOS SECTORES PRODUCTIVOS DE UN PAÍS

El término telecomunicaciones puede sonar muy abstrato, pero es parte esencial de nuestro día a día.

“Nos referimos a la transmisión de información por medios electrónicos a lugares lejanos. Esta información se envía mediante señales que pueden ser eléctricas o electromagnéticas. Las telecomunicaciones pueden transmitir voz, datos o video y pueden emplear medios como cables, radio, medios ópticos o satélites”, define Hipólito Delgado, referente y líder de opinión en tecnología en el país.

¿Cuándo surge en RD?

La celebración del Día Mundial de las Telecomunicaciones tiene una larga historia. En 1865, se fundó la Unión Telegráfica Internacional, la primera organización internacional dedicada a la regulación de las comunicaciones telegráficas. Con el tiempo, la organización evolucionó y se convirtió en la UIT, la agencia especializada de las Naciones Unidas encargada de coordinar las políticas de las telecomunicaciones en el mundo.

El experto relata que en República Dominicana se remonta al año 1884, cuando el Poder Ejecutivo otorgó el decreto para instalar el Sistema Perfeccionado de Centrales Telefónicas de Nason.

La red urbana de la capital se estableció en 1888. El medio de comunicación más utilizado en esa época era el telégrafo, que tenía líneas de transmisión en varias ciudades del país. En el siglo XX, el sector de las telecomunicaciones experimentó varios progresos y cambios, como la puesta en marcha de la primera estación de radio en 1924, la fundación de la Compañía Dominicana de Teléfonos (CODETEL) en 1930, la apertura de la primera estación de televisión en 1952, la incorporación de la telefonía móvil en 1986 y la llegada del internet en 1995.

En 1998, se aprobó la Ley General de Telecomunicaciones no. 153-98, que dio origen al Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL) como el principal ente regulador estatal de las telecomunicaciones.

“Esta ley tenía como objetivo impulsar el desarrollo ordenado y eficiente de este sector en el país, asegurar la competencia justa y efectiva entre los proveedores de servicios públicos de telecomunicaciones, defender los derechos e intereses de los usuarios y promover la universalización del acceso a las tecnologías de la información y la comunicación”.

Relevancia para el desarrollo

En la actualidad, las telecomunicaciones juegan un papel fundamental en nuestra sociedad. Permiten la transmisión de información y datos a través de diversos medios, como el teléfono, internet, la radio y la televisión. Además, son un motor para el desarrollo económico y social, ya que promueven la innovación, la educación, el comercio y la inclusión social.

Así lo afirma Delgado: “Las telecomunicaciones juegan un papel fundamental en el presente, ya que facilitan la comunicación a distancia entre personas, empresas, instituciones y países. Las telecomunicaciones permiten el intercambio de información de forma rápida y eficiente, lo que favorece el desarrollo del conocimiento, la educación, la ciencia, la cultura y la innovación”.

También son importantes para el desarrollo diario y económico del país, ya que facilitan la prestación de servicios públicos, como la salud, la seguridad, la justicia y la administración. Además, impulsan la competitividad y la productividad de los sectores como la agricultura, la industria, el comercio y el turismo.

Posición de RD

El especialista cita el Índice de Desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (IDI) que realiza la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) cada año. Este índice evalúa el nivel de acceso, uso y habilidades de las TIC en 176 países del mundo, basándose en 11 indicadores.

De acuerdo con el último informe disponible, correspondiente al año 2017, República Dominicana se ubicó en el puesto 94 del ranking mundial de países en telecomunicaciones, con un valor del IDI de 4.34 sobre 10. Esto implica una mejora de 8 puestos y un incremento de 0.51 puntos respecto al año 2016.

En el ranking regional de América Latina y el Caribe, República Dominicana se ubicó en el puesto 16 de 33 países, por debajo del promedio regional de 4.65. Los países mejor ubicados en la región fueron Uruguay (51), Argentina (54) y Chile (55).

Inteligencia artificial

La Inteligencia artificial (IA), tan sonada en estos días, tiene una relación estrecha con las telecomunicaciones. Algunos ejemplos de cómo se utiliza son:

• Proporciona un servicio de atención al cliente automatizado, mediante chatbots, asistentes virtuales o sistemas de reconocimiento de voz.

• Optimizar el funcionamiento y el rendimiento de las redes, mediante técnicas de aprendizaje automático que permiten analizar datos, predecir fallos, ajustar parámetros o gestionar el tráfico.

• Ofrecer productos y servicios personalizados a los clientes, mediante algoritmos que analizan sus hábitos y necesidades.

• Desarrollar nuevas soluciones y aplicaciones basadas en la IA, como la realidad aumentada, la realidad virtual, el internet de las cosas o la conducción autónoma.

Derecho humano

El acceso a Internet está reconocido como un derecho fundamental por las leyes de varios países y como un derecho humano por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Hipólito Delgado asegura que la viabilidad de garantizar el acceso a Internet como un derecho humano depende de varios factores: disponibilidad, accesibilidad, asequibilidad, calidad y diversidad de las infraestructuras y los servicios de Internet; el desarrollo de las capacidades y habilidades digitales de las personas y el respeto a los principios de neutralidad, apertura y privacidad en Internet.

Este proceso se puede acelerar mediante diversas acciones:

• Invertir en el desarrollo y la mejora de las infraestructuras y los servicios de Internet, especialmente en las zonas rurales, remotas o marginadas.

• Reducir los costos y las barreras económicas para el acceso a Internet, mediante políticas públicas, subsidios o cooperación.

• Promover la alfabetización y la educación digital, mediante programas de capacitación y apoyo a las personas que tienen dificultades para usar Internet.

• Proteger la libertad de expresión y la seguridad en Internet, mediante marcos legales y técnicos que respeten los derechos humanos y prevengan la censura, el espionaje o el abuso.

• Fomentar la participación ciudadana y la inclusión social en Internet, mediante el desarrollo de contenidos locales, relevantes y diversos que reflejen las necesidades, intereses y culturas de las personas.