Ana Elmúdesi y Natalia Ravelo

Para Ana Elmúdesi y Natalia Ravelo, la creatividad y el optimismo es lo básico para vivir. Embellecer el lugar donde se habita de manera sencilla es lo que han estado haciendo desde hace unos quince años. Se conocían desde la universidad cuando ambas estudiaban diseño de interiores, unieron sus inquietudes y comenzaron a explotar su talento con un pequeño taller de tapicería, donde casi la mayoría de las herramientas y elementos necesarios para realizar su trabajo tenían que importarlo. Es aquí donde comienza lo que es este exquisito lugar, el cual ha revolucionado desde el 1994 el concepto de decoración en la ciudad capital. Con la espontaneidad y el buen gusto de estas dos talentosas mujeres, este establecimiento es una importante y obligada opción a la hora de decorar residencias y por qué no, también oficinas en cualquier época del año. Hoy Básicos es una tienda camaleónica. A decir de sus propietarias sus líneas van cambiando según las necesidades de sus asiduos clientes. Actualmente están introduciendo y promoviendo una línea de sofás tapizados. Se trata de un mobiliario hecho con material de primera tanto en su esencia como en sus telas. De igual modo, la tienda cuenta con el mimbre y el rattán, que a lo largo de los años la han distinguido. Esto complementado con los adornos decorativos siempre a la vanguardia como el “vintage” que consiste en elementos antiguos con un toque moderno. “Queremos que las personas vean nuestros artículos, como una marca, que donde quiera que haya un detalle de la tienda las personas sean capaces de reconocer que pertenece a nosotros”, argumenta Ravelo, a esto suma Elmúdesi, que cuentan con un departamento denominado “Básicos Proyectos”, en el cual trabajan personalmente en asesoría en diseño de interior de cualquier espacio, desde cortinas, tapicería y pintura en general. Esta orientación, sin duda alguna, constituye un valor agregado que distingue la tienda y explica por qué Básicos se ha mantenido en el mercado por tanto tiempo.