La fe es una convicción

“La fe es seguridad de lo que se espera y prueba de lo que no se ve. Por su fe son recordados los antiguos, por fe tuvo Abraham a su hijo tan anhelado”. (Hebreos 11, 1-2).

El 11 de agosto marcó una nueva ilusión para mi vida: nació mi sexto hijo, una niña, cuando ya yo pensaba que la “fábrica” se había cansado de operar.

Una niña preciosa y sana, a pesar de todos los malos augurios de que a mi edad era un riesgo demasiado grande.

Yo tenía casi a toda la iglesia dominicana orando por mí: grupos de oración, grupos de matrimonios, sacerdotes, amigos y familiares; muchos me preguntaban si yo iba a tener ese hijo, y yo les decía que era un regalo que Dios me enviaba para dar más hijos a su iglesia. Disfruté mucho a mi hija pequeña; mi otra hija le lleva 1 2años y el último, cinco años a esta.

Las lecturas de este domingo hablan de la fe, de la fe que mueve montañas, y es que cuando se tiene fe en Dios, todo es más fácil de lograr. Por eso es importante recordar que, por más miedo que tengamos y por más que dudemos, si tenemos a Dios y confiamos en que su tiempo es perfecto, todo irá bien. Amén.