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Buenos y sanos pensamientos...

Es tiempo de cambiar las ideas negativas por las positivas. ISTOCK

Lesbia Gómez SueroSanto Domingo, RD

El hombre no asimila que un pensamiento continuo y prolongado sobre una misma idea o situación genera una carga energética que adiciona un campo de vibración, bueno o malo, del pensamiento.

O sea que mantener el enfoque con la afirmación de lo que se decreta sobre las dificultades anímicas y físicas magnifica sus efectos a escala global.

La actitud negativa se ha mantenido por siempre en la conciencia individual y colectiva, creando el morbo que se retroalimenta con las emanaciones de pensamientos negativos del entorno. También induce a que se codifique en la psique como modelo normal de conducta.

En interés de modificar las actitudes y pensamientos, y en un intento de frenar sus efectos, han de llevarse a cabo proyectos pilotos disciplinarios que se inicien en el hogar, comprometiendo a cada miembro a sujetar con voluntad todo elemento nocivo. Cada uno debe orientar la energía positiva a los demás núcleos que se conformen, con afirmaciones de ser: “Luz en la obscuridad; valor en la adversidad; confort en la limitaciones, y provisión y suministro en la escasez”.

Esto crea un hábitat a la energía calificada con las afirmaciones que se mantienen como foco de luz en el hogar y el planeta.

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