Selección de la nueva Cámara de Cuentas

La comisión de la cámara de diputados que trabajó con la pre selección de los candidatos aspirantes a formar parte de la cámara de cuentas, terminó su proceso de depuración y en esa preselección quedaron fuera, todos los miembros actuales del Pleno de la Cámara de Cuentas que aspiraron a re elegirse.

Era quizás lo que se estaba esperando que ocurriera, dado los problemas que durante todo el camino este Pleno tuvo. Problemas de todo tipo, situaciones que al final le impidieron poder desarrollar un trabajo de excelencia, completar un programa de trabajo, un plan anual plausible y auditar la mayor cantidad de entidades del Estado, ayuntamientos, direcciones posibles con los recursos disponibles.

Y al mismo tiempo dar respuesta a esa confianza que el pueblo dominicano había depositando en esta nueva Cámara de Cuentas y que surgió luego de un gran escándalo, donde los anteriores miembros del Pleno fueron sometidos a la justicia, acusados penalmente, cuyo proceso no parece haber concluido.

Ahora con esta nueva preselección que ha hecho esta comisión de la Cámara de Diputados, se supone que deberían presentar ternas para formar parte de lo que sería el Nuevo Pleno.

Nosotros tuvimos la oportunidad de participar en el pasado proceso de selección intentando ser miembro de la Cámara de Cuentas, por esa razón queremos aportar una idea, que quizás no sea bien recibida por parte de la comisión, pero que de repente podría contribuir a una mayor sinergia en el nuevo equipo de trabajo. Y evitar las históricas divisiones, que por años se observan en este órgano constitucional.

Nuestra propuesta es simple, que se seleccione primero al presidente de la cámara y que este sea integrado en la selección de los demás componentes del pleno. El enfoque de equipo y la sinergia se facilita, pues la cabeza de la organización, tiene la oportunidad de tener un primer contacto, con los potenciales integrantes ya depurados, se facilita la gestión que se comienza, porque sencillamente se gana más confianza en el personal seleccionado.

Si nos situarnos en la posición de un gerente, un director o un ejecutivo, como usted lo quiera ver. Si se le dice: este es tu equipo de trabajo, no es lo mismo que si usted le permite a ese funcionario participar en la conformación del mismo. A no ser que de antemano, se conozcan las calidades de esos integrantes.

Posiblemente nuestra idea modifica el procedimiento previamente acordado en la comisión del congreso, pero si es posible un ajuste, entonces que se elija a quien va a ser el presidente del Pleno de la Cámara de Cuentas. Y que entonces el presidente se integre a la comisión, para también participar en este proceso vital.

Se podría pensar que se pierde independencia o se fomenta grupismo, si el presidente participa en la conformación de su equipo clave. Pero aquí conviene dar mayor importancia, al cumplimiento de metas y al mismo plan anual de auditoría, que a temas que escapan puramente de lo técnico.

El hecho de que el presidente ya seleccionado participe en la conformación del equipo clave, suma también el conocimiento técnico, para hacerse acompañar de profesionales de calidad y competencias probadas, y de esta manera minimizar las improvisaciones y la participación política, en la formación de un equipo ganador y que de respuesta al interés nacional.

Por ejemplo, en una Cámara de Cuentas el Pleno no tiene que tener, no tiene por qué tener como miembro a un abogado. Sí, la Cámara de Cuentas tiene que tener un departamento legal, pero deben ser contadores, contadores públicos autorizados, personas con experiencia en auditoría, integridad y ética probada, las personas que formen parte del pleno de la Cámara de Cuentas. Este es un trabajo eminentemente técnico, y el departamento legal hace sus aportes, en función de los requerimientos del pleno.

Ese es el perfil que debería tenerse para ser miembro del Pleno. Y así, de ahí para abajo, los equipos deberían estar formados, tratando de respetar aquellos temas multidisciplinarios, donde cada quien pueda desempeñar técnicamente su rol, porque tiene las competencias y las experiencias, para desarrollar una actividad y un trabajo de excelencia.

En ese departamento legal, tienen que haber profesionales de derecho que tengan conocimiento de temas relacionados, de lo que es una auditoría forense y de las implicaciones jurídicas que tiene un dictamen de auditoría emitido por la Cámara de Cuentas. Y que esas irregularidades que se pudieran determinar en cualquiera de las entidades del Estado, se sepa de antemano cómo manejarse, qué curso debe seguir, y cómo pueden realmente ser parte de una prueba, que se puede presentar en un juicio, en un tribunal.

Son detalles que la parte jurídica apoya. Pero independientemente de esto, el tema que quiero subrayar es la selección del equipo de trabajo, para minimizar esas guerras dentro del mismo pleno que se han venido produciendo en los últimos quinquenios.

Fácilmente tenemos más de diez años viendo situaciones donde se divide el pleno, y se forman islas de poder, y así mismo se forman los grupos de seguidores en esa gran pirámide organizacional que es la Cámara de Cuentas. Y cada quien entonces dice, no, yo pertenezco a este grupo, y cada quien se va ubicando con quien está. Esto es lo que se conoce como: un no equipo.

Entonces la selección de personal es fundamental, y si una persona va a ser el capitán del barco, es muy interesante que esa persona sepa y pueda participar en la selección de cuáles son aquellas personas claves, que le van a permitir sacarle el agua al barco cuando choque con una roca y pretenda hundirse.

¿Con quién se puede contar? Realmente el presidente de esta nueva Cámara de Cuentas, debe tener esa prerrogativa si desea comprometerse seriamente a una gestión exitosa. Por eso la importancia de que sea seleccionado primero el presidente y luego que sea integrada esta persona ya seleccionada, para completar la conformación del equipo fundamental de la Cámara de Cuentas de la República Dominicana.