Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

Estímulos y restricciones

Los seres humanos poseen impulsos individualistas, surgidos a lo largo de su proceso evolutivo debido a su lucha ancestral por sobrevivir en medios hostiles. Dejados en completa libertad, esos impulsos conducen a comportamientos y reacciones de consecuencias imprevisibles, con frecuencia antagónicas a lo que su participación en estructuras sociales cooperativas parece hacer más conveniente. Expresado de otra manera, las actuaciones derivadas del predominio de los comportamientos individuales pueden ser contrarias a las que mejor contribuyen a la consecución de los objetivos colectivos.

Como resultado de esa posible disparidad, en círculos académicos se han debatido las consecuencias de las políticas económicas, en cuanto a si tienen más capacidad para restringir que para estimular. No se trata de discutir si tal o cual política es o no es beneficiosa en una situación determinada, lo que dependerá de su formulación y efectividad. Lo que se debate es si en sentido general es más probable que una política expansiva logre fomentar la actividad económica, en comparación con la probabilidad de que una política contractiva haga disminuir el crecimiento.

En particular, se ha debatido la capacidad de las políticas económicas para sacar a un país de una recesión, o impedir que caiga en ella, en comparación con su capacidad para reducir la demanda agregada en situaciones inflacionarias. La conclusión más aceptada es que a muy corto plazo las políticas expansivas, sobre todo por el lado fiscal, pueden generar estímulos significativos con mayor celeridad que lo que las políticas restrictivas pueden hacer contraer el gasto total, pero que a un plazo más largo luce ser más factible restringir que estimular.

Ese resultado es influido por el mecanismo de transmisión de los efectos de las políticas económicas sobre las decisiones de individuos y empresas. Los estímulos directos provocan una respuesta inmediata del sector privado, pero su consolidación posterior es afectada por la creación de presiones cambiarias e inflacionarias que inciden sobre las expectativas. Las restricciones, en cambio, toman más tiempo en alterar la demanda pero tienden a provocar consecuencias acumulativas sobre el empleo, los precios y el nivel de las actividades económicas. Es común, por lo tanto, que los gobiernos tiendan a concentrar el diseño de sus medidas en función de los efectos que ellas ejercerán a corto plazo, ámbito en el cual sus probables consecuencias son más previsibles.