Salida masiva de haitianos desde EEUU creará problema de inmigración en RD
La deportación de 500,000 haitianos desde los Estados Unidos, muchos de ellos protegidos temporalmente con visado humanitario debido a la grave situación que se vive en ese país caribeño, le creará un serio problema de inmigración a la República Dominicana.
La RD no puede con la ola de haitianos que tratan de cruzar la frontera común y que le genera críticas de organizaciones que velan por el derecho de los haitianos, las que alegan que en muchos casos, dominicanos han sido víctimas de las deportaciones por su condición racial.
Haití no puede resistir una cantidad tan grande de sus nacionales que sean devueltos a un país que está actualmente damnificado. La República Dominicana, con mucho menos inmigrantes sin papeles en Estados Unidos, tampoco puede acoger a esos repatriados.
No hay que dudar que de esa cantidad de inmigrantes que los Estados Unidos expulsaría de regreso a su país, muchos verían como última salida, cruzar por la frontera a buscar refugio en la República Dominicana donde los varones pueden ofertar su mano de obra para la construcción.
Eso presenta a la parte dominicana un problema de migración mucho más serio que el actual. Y pensar que muchos negros y latinos votaron por el presidente Trump en las pasadas elecciones pensando que les iría mejor con el republicano. Afilaron cuchillo para su pescuezo.
Ya es tarde. A un mes de la entronización de Trump en la Casa Blanca, las encuestas en su generalidad dicen que las políticas de inmigración son las peores medidas adoptadas, al tiempo de quejarse por los altos precios de los alimentos, el aumento de la inflación y el precio de los huevos.
Durante su visita hace unos días a la RD, el secretario de Estado Marco Rubio expresó su comprensión a que no se podría cargar a la parte dominicana con una ola de haitianos que crucen su frontera. Esa ola de haitianos es lo que podría esperarse si son deportados 500,000.
Panamá y Costa Rica confrontan en la actualidad muchos problemas por haber acogido la sugerencia de Estados Unidos de recibir deportados de mal y buen comportamiento. La parte dominicana fue sabia al no comprometerse a recibir inmigrantes entre los cuales menudean los delincuentes.
El presidente Trump no ha bajado su tono belicoso sobre los diversos temas de política exterior que están en su mesa. Amenaza con arrasar a Gaza si los palestinos no aceptan su sugerencia de dispersar esa población entre los países árabes y convertirla en un enorme resort.
Mientras tanto, una serie de encuestas salieron al conocimiento público el jueves y en la mayoría de ellas el público considera inapropiados los pasos de Trump por los asuntos domésticos, como también internacionales. Dicen que la economía ha empeorado para la clase media. La escasez de huevos ha molestado a los consumidores.
Las muestras no llegaron a tiempo para recoger la reacción sobre dos decisiones de último momento que lucen arbitrarias: la eliminación del Correos público, una institución que ha servido de modelo a la de muchos países y la destitución de la directiva del Kennedy Center para las artes escénicas, institución venerable de Washington, D.C.
Al parecer en maridaje con el presidente Trump, de Rusia, el gobernante estadounidense quiere llevar contra la pared al presidente de Ucrania Volodymyr Zelensky, a quien culpó de la guerra que Rusia inició contra su país. Acorralado por la diplomacia y la guerra, Zelensky tiene pocas opciones.
Zelensky ha acogido con sospecha el afán de los Estados Unidos de llegar a un acuerdo para apropiarse de las “tierras raras” que tiene el vasto territorio ucraniano. También quisiera echarle manos a las dominicanas que están situados en las colindancias de la frontera con Haití.