Reformas, función pública y cadena de valor

Primer Tiro

Antes de proponer una reforma tributaria que aumente los ingresos fiscales sin aumentar tasas impositivas, se debe diseñar y poner en marcha un programa más verdadero y creíble de reformas al gasto público. El objetivo de aumentar la eficiencia y eficacia del mismo tiene que partir de que los recursos que aportan los contribuyentes se utilizan en actividades que generan producción publica, la que produce efectos de corto plazo, que satisfacen necesidades actuales de la población, los que a su vez generan impactos de largo plazo que aumentan el bienestar de las personas. En esa cadena de valor público, el Gobierno puede incidir solamente hasta la transformación de los insumos en producción publica, a través de las actividades que lleva a cabo. Por eso, antes de determinar los sectores, instituciones, programas, productos y actividades en las que existen oportunidades de aumento de la eficiencia y eficacia, se deben definir los criterios con que se identificarían dichas oportunidades, y para hacerlo, también de manera eficaz y eficiente, se deben tomar en cuenta las funciones públicas sustantivas de las instituciones y sectores en los que existen dichas oportunidades.

Segundo Tiro

Las tres macro funciones públicas sustantivas (rectoría, regulación y producción/prestación) solo se pueden ejercer eficientemente si se toman en cuenta sus codependencias, y sus relaciones con la cadena de valor público. La rectoría define el propósito y coordina la visión estratégica del sistema de producción o prestación del servicio público, pero también proporciona el marco de acción para la regulación y la prestación, asegurando que estén alineadas con las políticas y objetivos generales. Por tanto, no es cierto que la planificación y la gestión del uso óptimo de los recursos que requiere el programa de reforma del aumento de la eficiencia del gasto publico no sea una función sustantiva. La regulación traduce las políticas en normas concretas, y supervisa su cumplimiento, pero también asegura que la prestación cumpla con los estándares y pueda retroalimentar a la rectoría sobre la efectividad de las políticas. La producción/prestación implementa las políticas definidas por la rectoría y entrega la misma a los ciudadanos, pero también retroalimenta a la rectoría y a la regulación sobre los resultados obtenidos, e informa sobre las necesidades de ajuste en las políticas y las normas.

Tercer Tiro

La planificación es un componente esencial de la rectoría, ya que proporciona la dirección estratégica y define las acciones necesarias para alcanzar las metas de cualquier sistema de prestación de servicios públicos. La gestión presupuestaria y financiera está directamente relacionada con la planificación, ya que asegura que los recursos necesarios para implementar las políticas y planes estén disponibles, y sean utilizados de manera eficiente. Sin un ejercicio eficaz de estas subfunciones de la rectoría no se podría alcanzar los efectos e impactos esperados de un programa de reforma aplicado a la magnitud y composición a los eslabones de la cadena de valor del gasto público. El objetivo fundamental debe ser el aumentar la relación entre el presupuesto disponible y la cantidad de bienes y servicios públicos ofrecidos a la población, y he ahí donde subyace la esencia de las reformas necesarias para aumentar la eficacia/eficiencia del gasto público, pues la relación insumo/producto depende fundamentalmente del grado de alineación entre las funciones sustantivas y la cadena de valor público.