¡TRUMP: Su regreso, tratados… y arroz dominicano!
En una singular, pero positiva medida el Presidente Donald TRUMP anunció quien será su embajadora en el país, cargo vacante desde hace cuatro años; en otras latitudes se conocen noticias que abren y cierran etapas, que la Unión Europea finalmente, tras 25 años de discusiones firmó un Acuerdo comercial con el Mercosur, es una de ellas y, que el Alba, un Acuerdo moribundo se reunió en Caracas, es otra.
Todo comenzó hace unas décadas cuando Europa anunció la conformación de la Unión partiendo desde la Comunidad Económica Europea y con ellos sorprendió a Estados Unidos que, por primera vez en años volvió sus ojos a su patio trasero, el resto de América; su respuesta rápida – ante el peligro del ingreso de China a la OMC en el 2001 - fue el Área de Libre Comercio de las Américas en 1994, una magnífica iniciativa llamada, tristemente, a fracasar por la irrupción de un hombre, el coronel Hugo Chavez. El mismo me trasladó su disposición de abortarla en ocasión de una visita que giró, para conocerlo, al expresidente Joaquín Balaguer en marzo del 2001, en que fungí de acompañante el mismo día que partía hacia Buenos Aires a la Reunión de Ministros de Comercio que preparó la Cumbre de Presidentes en Canadá. Así lo comenté a Robert Zoellick, Jefe del Departamento de Comercio de Estados Unidos. Para entonces ya la Unión Europea buscaba un acuerdo con los grandes mercados de América del Sur a través del Mercosur, que como indicamos logró hace unos días.
Para el 2001 pese al interés del Presidente George Bush el ALCA, lanzada por Bill Clinton en la Cumbre de las Américas, no andaba bien, Hugo Chávez tenía gobiernos amigos muy contradictorios, el Sur tenía sus ojos puestos en Europa con quien tenía mayores negocios y las islas del Caribe, excepto RD- dependían de la colaboración del Acuerdo de Lome con los europeos: Desde la democratización de América iniciada en RD en 1978 y el neoliberalismo que le sobrevino en la década de los 80, Estados Unidos olvidó el continente, excepto para Migración y Narcotráfico y estaba pagando el coste.
Por la relación que teníamos en el Caribe y en Centroamérica – en esta última USA no tenía problemas – Zoellick nos pidió colaboración con el CARICOM y tras un encuentro con ellos logramos una sesión de trabajo fructífera con USA – en el hotel Hyatt Park que hospedaba a la delegación dominicana - hacia el encuentro de los presidentes al mes siguiente en Canadá, pero era obvio que el ALCA agonizaba antes de desarrollarse y, por ese motivo sugerimos tratados bilaterales y regionales de comercio tal y como ya había hecho Norteamérica, con Canadá, Usa y México.
El día primero de mayo me visitó en mi residencia el Agregado Comercial de Estados Unidos en el país para ampliar la propuesta en atención a que Zoellick había convocado a todos sus representes a una reunión informativa para iniciar las negociaciones bilaterales o regionales, según fuere el caso: luego por el traspaso de la atribución negociadora de Industria y Comercio a la Cancillería quedamos fuera al mes siguiente de las negociaciones a un alto costo para el país, lo que motivó mi renuncia en el Ministerio. En los años siguientes USA concluyó con Centroamérica, en cuya discusión RD no participó, sino que más tarde en julio del 2004 se adhirió, de ahí la baja protección al arroz, que hoy es noticia y, luego USA suscribió otros tratados con Colombia y Chile entre otros.
Entretanto Europa se fortalecía con su mercado interno de 27 países y China que con 1,272 millones de habitantes ingresó en el 2001 a la OMC, tras 15 años de negociaciones, emergía como un tsunami que sólo se detuvo cuando Trump le plantó cara en el 2017 y dio inicio a la última guerra comercial, una que resultaba muy costosa para la nación asiática, pero el mandatario norteamericano salió de la Casa Blanca en el año 2021 e Inglaterra salió de la Unión Europea en el 31 de enero del 2020 tras el Brexit lo que debilitó dicho bloque, el resto es historia contemporánea.
Para el año 2025 lo cierto es que como un gladiador que venció la adversidad en la arena Trump vuelve y con él todo cambiará para Europa y China; Rusia solo es de consideración militar no obstante sus enormes reservas de energía, Japón es un aliado que esta misma semana empieza a alinearse y el resto, incluida la India, no comportan amenazas comerciales ni informáticas actuales que es en donde se librará la guerra de los próximos años.
Frente a un Trump con todos los poderes de la nación que decide e impone, América inicia el año totalmente fragmentada, Canadá, golpeada por una crisis política que puede derribar al Gobierno tratará de salvar su relación privilegiada y si para muestra basta un botón ya su premier visitó al electo en su residencia de Florida; México será golpeado duramente, se dirá que por la migración y el narco, aunque en el fondo está su relación con China. La opinión de Trump sobre Centroamérica, en particular de El Salvador y demás naciones, es pública, sin exceptuar que Nicaragua, destruida, al afianzar la dictadura del matrimonio Ortega, no debe esperar flores.
Suramérica sumergida en la peor lawfare de su historia, con dictadura en Venezuela y gobiernos inestables en Perú, Ecuador, Bolivia y Argentina recibe el anuncio de que el nuevo gobernante tendrá una posición dura con las dictaduras, que no excluye la ausencia de partidos en la quebrada Cuba o el ingobernable Haití, que ya representa un problema migratorio en el norte.
PETROCARIBE, descontinuado desde el 2019 y La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) compuesta por 14 países, que ya no anuncia nada luminoso reunió esta semana a tres presidentes arrinconados, Maduro, Díaz Canel y Ortega en Caracas para pasar revista a su sombrío panorama continental. Venezuela, sin el poder de una chequera nacional que Chávez manejó como una cuenta personal, hasta comprando deudas externas como en el caso argentino, carece de la otrora influencia hemisférica, una que tampoco conserva el Banco del Alba que procuró sustituir al BID.
La sola presencia del nuevo inquilino de la Casa Blanca producirá cambios y modelará la conducta del mundo y, por ese motivo, siendo que ha tenido lazos comerciales y políticos cordiales con los dominicanos, es propio esperar que, para nosotros haya perspectivas halagüeñas, sobre todo en materia del respeto a nuestra política migratoria: No esperemos cooperación, que eso ya no existe, pero si podemos tener reciprocidad y respeto a las decisiones nuestras que no afecten sus intereses y en ese orden, el precipitado Decreto 693-24 puede llevarnos a una discusión incómoda sin estar preparados, bajo el alegato poco eficaz de proteger al productor, pues cubre apenas el 3% de las importaciones de arroz y no libera las maquinarias agrícolas de impuestos, ni de intereses el dinero de financiar las cosechas.