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Abinader elimina símbolos patrios

El presidente Luis Abinader eliminó los símbolos patrios de la Presidencia y el Gobierno dominicano ante nuestros ojos, y nadie dice absolutamente nada, esto parece pura magia.

El mensaje iconográfico del gobierno de Abinader, no tiene símbolos patrios, solo una silueta de la cúpula del Palacio Nacional o del Congreso estadounidense, un símbolo de poder.

En artes gráficas, lo más importante se coloca en la esquina superior izquierda, lo menos importante va en la inferior derecha, el ojo inconscientemente sigue esa diagonal descendente.

La página web de la presidencia tiene, en la esquina superior izquierda, lo más importante, la cúpula, en la inferior derecha, lo menos importante, el escudo nacional.

En las presentaciones gubernamentales, hay múltiples réplicas del ícono del poder, es un mensaje subliminal, directo al inconsciente. Construyen lealtad a ese ícono, no a la bandera, ni al escudo, los colores patrios desaparecieron; esto está premeditado.

El Foro Económico Mundial (FEM) del que Abinader y la vicepresidenta Raquel Peña son miembros, planea desmantelar el estado-nación que conocemos, no habrán “ciudadanos” todos seremos “consumidores”.

Sustituyen símbolos patrios por un ícono del poder, matan el nacionalismo, promueven el “multilateralismo” cuyo símbolo, parece una araña, sus patas quizá representan los “laterales” del “multilateralismo”.

El Pacto Migratorio destruyó las fronteras, el de la pandemia traspasará la salud pública nacional a la Organización Mundial de la Salud (OMS). El Pacto por el Futuro, le entregará todo el poder político mundial al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Después modificarán la ONU, y el sistema financiero internacional, así avanzamos al “Gran Reinicio”, que promueve el FEM.

Los símbolos patrios nos representan a todos, el símbolo del poder sólo representa al poder.

Hablar ante los símbolos patrios, proclama lealtad a la patria, ante el ícono del poder, proclama lealtad al poder del presidente, ese discurso iconográfico resulta semióticamente irrefutable.

Con la ley 1-24, Abinader tiene más poderes que Trujillo. Durante la tiranía algunos delataron amigos y familiares, por miedo; en la “democracia” de Abinader estamos “legalmente obligados a delatar”.

El expresidente Danilo Medina una vez sacó el escudo de la bandera en un logo oficial, casi lo matan, Abinader eliminó escudo, bandera, colores, y nada pasa.

Los “nazi-onalistas” están distraídos con niños haitianos en las escuelas, y parturientas en los hospitales; ignoran lo más importante, esto es pura magia, no tengo otra explicación.

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