La Oposición frente al espejo
Los resultados electorales de los años 2020 y 2024 no mienten, en sentido global, La Oposición ha retrocedido. Solo se ha producido una redistribución en su votación, pero no ha avanzado un centímetro. Las estadísticas, como los hechos, también son tozudas, recordando a Lenin. Si es así, y lo es, entonces habrá que sacar las experiencias de lugar y las posibles líneas de acción si se quiere revertir esta crítica situación.
En el año 2020, el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y aliados, en el gobierno, obtuvo el 37,46%, la Fuerza del Pueblo (FP) y aliados en la oposición, el 8,90% y el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y aliados, el 52,52%, logrando la victoria en primera vuelta. En 2024, La Oposición (FP y aliados el 28,85% y el PLD 10,39%) obtuvo el 39,24% y el PRM y aliados, el 57,44%, repitiendo y aumentando los márgenes porcentuales de su victoria. Es harto evidente que los que gobernamos el país durante veinte años, retrocedimos electoralmente.
Lo que ha habido, producto de la irracional división del PLD en el año 2019, es una redistribución de la votación de nuestro otrora poderoso ejército morado. El PLD pasó de un sólido segundo lugar, a un lejano tercero. La FP pasó del tercer lugar, al segundo.
Los integrantes de la FP parecen sentirse muy bien con los resultados obtenidos en el 2024. Muchos lograron su sueño y su errado objetivo estratégico: desplazar al PLD, mas no ganar las elecciones presidenciales. Algo es algo, peor es nada, dice el refrán. Ahora que están celebrando su congreso y piensan realizar un FODA, deberían hacerse las siguientes preguntas, ¿era posible haber obtenido una votación más alta? ¿Dónde fallaron si el foco de los ataques en estos cuatro años recayó en el PLD y no en la FP? ¿Ese 28,85% es su techo? ¿Podrán reinventarse para hacer una oposición de verdad, pues también fueron un poco “light”? ¿Se desprenderá una parte importante de su dirigencia de la presumida creencia de que ya son casi ministros, directores y embajadores y cónsules, lo que la hace ver como perdonavidas? ¿Sabrán lo que tienen que hacer para llegarle a un electorado mayoritariamente femenino, joven y desinteresado en la política? Me disculpan por opinar al respecto, pues no soy miembro de la FP, aunque sí de La Oposición.
Respecto de mi partido, he escrito y hablado. En mi anterior entrega, “PLD: Renovación o muerte lenta”, fui bastante explícito acerca del futuro inmediato del partido, pero aquí le dejo algunas preguntas a la dirección política, a propósito del X Congreso Reinaldo Pared Pérez.
A partir del acentuado descenso electoral de la organización, ¿qué haremos con los resultados de la evaluación crítica y autocrítica? ¿Serán engavetados como la del 2021? ¿Quién procesará y hará las recomendaciones de lugar a partir de los resultados? ¿Un tercero imparcial como se hizo en el 2021? ¿Saben los compañeros y compañeras que la principal recomendación de la tercera imparcial (peruana) en el 2021 fue: “Saquen el elefante de la corrupción de la sala”? ¿Cómo reaccionará, si lo hace, el Comité Político ante los previsibles resultados negativos para la dirección, de la evaluación en curso? ¿Sabe el CP que la mayoría de los organismos que han hecho la evaluación han sido implacables con nosotros? Entonces, ¿A reelegir casi a todos por intercambio de apoyos? ¿Lo lógico no sería ponerse de lado (si aman más a su partido que el asiento que tienen) para que haya una verdadera renovación? ¿Creen ustedes que montando una pantomima de congreso, nos recuperaremos electoralmente? ¿Hasta dónde podrán llegar los formidables aspirantes presidenciales que tenemos, si en vez de un “Mercedes 600” como el que encontró el presidente Danilo Medina en 2011 “parqueado debajo de la Mata de Limoncillo”, ahora solo cuentan con un Sonata con problemas en el motor?
Ahí tiene La Oposición tantas preguntas que contestarse. De las respuestas que den en sus congresos, dependerá si pueden o no volver al poder. Si pueden reeditar, con los ajustes de lugar, aquella mayoría que gobernó 20 años. Si todo sigue como que aquí nada pasó (PLD) y que ya “somos gobierno” en el 2028 (FP), veremos al PRM gobernar 16 años consecutivos. No es imposible, nosotros lo hicimos del 2004 al 2020.