FIGURAS DE ESTE MUNDO
Un servidor
Dios instituyó el gobierno civil en la tierra como Su servidor y, como tal, ha de cumplir, voluntariamente o no, Sus propósitos soberanos. La razón de ser del gobernante es –conforme a la “Carta a los romanos”- restringir el mal y proteger la vida y la propiedad; motivar a hacer el bien y castigar al que hace lo malo, pues tiene autoridad para juzgar y condenar al que ha cometido un delito. En Romanos 13:1-4, el apóstol Pablo escribe: “No hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay por Dios han sido establecidas… Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien… y vengador para castigar al que hace lo malo”. Por lo visto, la prioridad de Dios al instaurar el gobierno humano fue recompensar el bien y restringir la corrupción en un mundo cuyo “pensamiento es de continuo al mal”.