Desde mi pluma
Punto de partida
Otro capítulo importante de nuestra historia como nación comienza a escribirse hoy.
Como es costumbre cada cuatro años, este 16 de agosto da inicio un nuevo mandato presidencial, en esta ocasión se trata del segundo gobierno de Luis Abinader.
Un primer cuatrienio que arrancó con muchas expectativas, promesas de cambio y adversidades, y termina con mucho más de todo eso.
Fue un periodo interesante, cuestionable en todos los aspectos, pero también con innegables luces.
El venidero promete inminentes reformas y seguirá enfrentando retos en temas cruciales como la educación, la salud, la economía, la migración, la seguridad ciudadana, la lucha contra la corrupción.
Siendo más específicos, los dominicanos también esperamos que en esta oportunidad, tópicos neurálgicos como la salud mental, la violencia de género, el costo de la canasta básica, el caótico tráfico vehicular, el servicio de electricidad, el desempleo, entre otros, formen parte de las conversaciones cuando de políticas públicas, toma de decisiones y legislaciones se trate.
Se trata de problemáticas que han sido constantes en la agenda pública, pero que, en mi opinión, aún no han encontrado respuestas satisfactorias.
Hoy entregamos una vez más un voto de confianza con la esperanza de avanzar, pues, independientemente de la persona que ocupe esa posición, del partido que haya ganado elecciones, de los funcionarios que seguirán o llegarán a estar por primera vez al frente de los ministerios e instituciones, y de los senadores y diputados que integren este nuevo Congreso Nacional, todos deseamos que sea una gestión exitosa.
La esperanza es avanzar, más allá de colores partidarios o nombres individuales, hacia un país donde las oportunidades sean accesibles para todos.