Buenos amigos

Es tiempo de que fomentemos la verdadera amistad. El mismo Jesús dijo que nos llama “amigos”. Tristemente, hoy la amistad se ha cualquierizado y ha perdido su sentido. Enseñemos a los más jóvenes el verdadero sentido de la amistad, que es la que perdura para siempre y dice en todo momento la verdad.

Si alguien te lleva a cometer actos malos, no es tu amigo. El amigo te ayuda a crecer y a superarte. Así que, al enseñar a los jóvenes sobre el verdadero sentido de la amistad, les brindamos una herramienta valiosa para la vida: una relación que perdura y en la que la verdad y el crecimiento mutuo son fundamentales.

Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.