Herramientas comunicaciones que promueven violencia

En el análisis del tema, es importante precisar que a través de las nuevas tecnologías, podemos encontrar múltiples conductas que constituyen el inicio de la violencia de género e intrafamiliar, que aunque parecen leves, pueden llegar a convertirse en un claro hostigamiento, entre estas, la vigilancia vía WhatsApp, el control de la hora de última conexión, revisión de mensajes, la instalación de cualquier tipo de artilugio utilizado como mecanismo de control, entre otras acciones que suponen un tipo de coacción que impiden el libre obrar de la víctima. Así como, el atentado sexual y la pornografía infantil, conductas tipificadas y sancionadas en la Ley No. 53-07 sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología.

Respecto al marco legal, en la República Dominicana, existe un proyecto de reforma de la precitada ley y, en el Congreso cursa el proyecto de ley que crea el Sistema Integral para la Prevención, Atención, Sanción y Erradicación de la Violencia contra las mujeres, que proponen tipificar el ciberhostigamiento, el ciberacoso, el ciberbullying, las amenazas directas de daño o violencia, la violencia física facilitada por las tecnología, el abuso, explotación y/o trata de mujeres y niñas por medio de las tecnologías, los ataques a grupos, organizaciones o comunidades de mujeres.

Por consiguiente, urge potenciar los mecanismos que garanticen fortalecer el marco legal y la formación académica sobre el tema, de esa forma, asegurar el empoderamiento digital de las mujeres y su seguridad en línea. Para lograr los objetivos, proponemos la impartición de formación sobre el uso estratégico y creativo de las TIC, especialmente en el uso de las redes sociales, así como, la formación en lenguajes de programación con perspectiva de género; enfatizando sobre el importante papel que puede jugar la programación y la industria de desarrollo de software que garanticen la seguridad y la solución de problemas sociales.

En adición, se sugiere la implementación de jornadas de sensibilización, dirigidas al personal que labora en los telecentros, centros comunitarios y medios de comunicación en general, con el objetivo de promover a través de sus plataformas las políticas de prevención de los tipos de violencia de género contra las mujeres y las niñas facilitada por las nuevas tecnologías.