en la ruta
Llamado a la unidad
Luego de una participación memorable en la 78ava Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), donde reiteró su llamado a la conformación de una fuerza multilateral que enfrente la grave crisis haitiana y denunció la construcción ilegal de un canal por estos para desviar las aguas del fronterizo rio Dajabón, el presidente Luis Abinader hizo un llamado de unidad a la oposición frente a ese tema. Una petición correcta, pero sobre todo muy acorde al momento que vive la nación ante el irrespeto de un Estado vecino, si es que se puede llamar así, que pese al caos imperante, sabe ponerse de acuerdo para levantar un trasvase hídrico que contraría lo establecido mediante un tratado binacional de 1929 y que fue ratificado en 1936.
Luis Abinader, que ha sido coherente en su defensa a los intereses nacionales y a la soberanía territorial, ha tomado las acciones de presión que pone a su mano el derecho internacional público para, mandando los mensajes (de todo tipo) pertinentes, hacer valer nuestros derechos y que se detenga la obra.
De ahí la importancia a que las fuerzas políticas opositoras depongan los intereses grupales y enarbolen la bandera nacional ante un escenario que reclama del concurso de todos y que, vale decir, el presidente ha asumido con valor, firmeza y responsabilidad histórica.Por tanto, el país vería con muy buenos ojos si el alto liderazgo político (los tres principales candidatos presidenciales), que en el fondo reconocen que tenemos razón en el reclamo y están en contra de la construcción ilegal, logran fijar una posición conjunta ante el atropello.