Con don Juan en el corazón

Fui desde muy joven admirador del profesor Juan Bosch a quien vi por vez primera en el parque Colón cuando el PRD estaba ahí y mí mamá trabajaba con Ángel Miolan, una ayuda de Thelma Frías por la situación familiar del 30 de mayo, yo tenía 6 años.

Luego lo seguí y lo leí, y lo veía en la calle Luperon donde su hijo Leon,y de paso para la imprenta, luego en tertulias junto a Pedro Mir Franklin Mieses y otros, su honestidad y su valía nos hacían sentir orgullosos de ser igual que él, dominicano.

Fundó el PLD para terminar la obra de Juan Pablo Duarte, y creía en sus muchachos, y en que serían presidentes porque leían y estudiaban. El profesor murió gracias a Dios sin ver en qué se convirtieron y convirtieron a su partido.

Sí estuviera vivo los hubiera echado a todos como hizo Jesús en la casa de su Padre, y hoy en realidad estuviera del lado de la luz, de la honestidad y el trabajo que representa y encarna Luis Abinader Corona, quien tiene razón en decirlo y creerlo el presidente de la honestidad don Juan era una montaña de honestidad.