AGENDA SOCIAL
Mejores empleos
La Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL) afirma que la recuperación de empleos ha sido heterogénea a lo largo de la región, aunque hay países donde algunos indicadores aún no alcanzan los niveles anteriores a la pandemia, como es el caso de la República Dominicana, que según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) es el único país donde el total de asalariados privados en 2022 estaba por debajo de lo registrado en 2019.
La CEPAL también plantea que en la región existen brechas de género estructurales en materia de tasas de participación y de desocupación, que en el caso de la República Dominica se pueden verificar en los datos más recientes del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, que detalla que en el tercer trimestre de 2022, las mujeres representaron el 41.7% y los hombres 58.3% de la Fuerza de Trabajo total.
A esto se suma la disminución de la productividad laboral promedio y el estancamiento de los salarios medios reales ajustados por inflación, indicadores que también pesan mucho sobre el mercado de trabajo dominicano.
En ese contexto en el que los principales indicadores del mercado laboral presentan una recuperación que es insuficiente para impulsar el desarrollo del país, hay que abrir el debate sobre la necesidad de mejores empleos en la República Dominicana, sobre todo porque el país muestra unos indicadores macroeconómicos y de captación de divisas e inversión extranjera directa que supera al promedio de toda América Latina.
Hay que acoger el planteamiento de los organismos internacionales, hay que poner en marcha mejoras en la productividad, en la adopción de tecnología que incremente los resultados en cada sector y que estas facilidades se traduzcan en incrementos salariales y mejores condiciones para los trabajadores, en la misma medida en la que beneficia a los sectores productivos.
En la transición hacia la pospandemia, los gobiernos deben pensar en políticas públicas que aborden las berchas de ocupación por sexo y entre jóvenes y adultos, acoger tendencias positivas como el teletrabajo, las pasantías profesionales y las medidas que generan equilibrio entre familia y trabajo. Por un lado hay que propiciar “la preservación de la relación laboral” y por el otro hay que “facilitar la creación de puestos de trabajo”, como recomiendan los expertos.
El amigo José Manuel Salazar-Xirinachs, Secretario Ejecutivo de la CEPAL, que antes había sido Director Regional de la OIT, dijo recientemente que “no es posible crear un mejor futuro del trabajo sin crear un mejor futuro de la producción. Son dos caras de la misma moneda”, y tiene toda la razón. La República Dominicana, al igual que toda la región, tiene que aumentar en su productividad para generar mejores empleos, que es lo mismo que propiciar cambios sociales de gran calidad para la vida de las personas, y el consecuente círculo virtuoso de progreso y desarrollo. Necesitamos urgente una gran reforma del mercado laboral.