Al filo de la democracia
La proliferación de impeachment o juicios políticos
A lo largo de la historia reciente, América Latina ha experimentado varios casos de juicios que han resultado en la destitución de líderes políticos. Históricamente, el impeachment es una antigua institución del common law, que surgió en Inglaterra en el siglo XIV.
Como ejemplo, podemos observar que la Constitución de la República Federativa del Brasil, establece la figura del impeachment desde el 1891. La doctrina brasileña, define el proceso (impeachment), cuando posee las siguientes particularidades; 1.-tiene características políticas; 2.-se origina por causas políticas; 3.-busca resultados políticos; 4.-se instaura bajo consideraciones de orden político; 5.-es juzgado siguiendo criterios políticos; y 6.-no se excluyen, los criterios jurídicos.
En el caso de Brasil, no podemos olvidar la correlación existente entre el poder, la competencia y la responsabilidad que acumula el Presidente de la República al ejercer esas funciones, de tal suerte que las omisiones a sus funciones posibilitarían la destitución. El objetivo, es remover de su cargo e inhabilitar a funcionarios del Estado para el desempeño de cargo público por un espacio de tiempo determinado y con independencia de posibles sanciones penales adicionales. Fernando Collor de Mello, fue el primer presidente elegido por sufragio universal después del régimen militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985.
En medio de denuncias de corrupción, y antes de que se ejecutara un proceso de impeachment en su contra, en el 1992, renunció a su cargo.
Veinticuatro (24) años después, ocurre la dimisión de Dilma Rousseff, la cual se llevó a cabo en la atmósfera de la exigencia de responsabilidad característico del sistema presidencialista, el impeachment.
El impeachment puede ser enfocado como un mecanismo de control político e institucional o bien como un mecanismo al servicio de la continuidad institucional, en el sentido de que, si un funcionario no es relevado, su permanencia implicaría un riesgo para el sistema político y democrático.
¿Cuáles fueron las causas que motivaron el impeachment, en contra de Dilma Rousseff?
a.- La complejidad del contexto sociopolítico, las características propias del fisiologismo institucional brasileño, b.- las Revueltas de Junio, de 2013, convocadas por movimientos, apartidistas, los cuales se hicieron sentir en todo Brasil, con la consigna de priorizar el gasto público, c.- la difusa numérica parlamentaria resultante de las elecciones de 2014. Factores determinantes, que incidieron en la ejecución de este mecanismo de responsabilidad.
Como dato curioso, la presidenta Dilma colocó en marcha una reforma política que permitiera un freno a los insoportables índices de corrupción política que disminuían el avance de Brasil.
En el 2014, se hace pública la operación de la Policía Federal de Brasil conocida como operación Lava Jato, acontecimiento de gran significado en la vida social y política.
En escasos meses adquiriría la condición de mayor escándalo de corrupción de la democracia brasileña, y con fuertes ramificaciones en toda América Latina.
Las experiencias recientes en América Latina han ubicado al juicio político como un tema de renovada actualidad, la cual estimula a recapacitar en relación al proceso de juzgar a los presidentes y sus posibilidades políticas futuras.
Esta ponderación de juicio político o el impeachment, no existe en todos los países de América Latina; Argentina y Brasil siguen el modelo clásico; en cambio, Venezuela, como otros países de la región derivan el juzgamiento a la Justicia.
La ausencia de una cultura de responsabilidad política es una cuenta pendiente que se agrega a la crisis de representación y a la pérdida de credibilidad sufrida por la clase política regional.
William Blackstone, manifiesta que el impeachment era un instrumento que sólo podía ponerse en funcionamiento ante la violación de una ley bien establecida, mientras que Edmund Burke sostenía, que el impeachment debía incluir también los casos de abuso de autoridad y abuso de confianza de los funcionarios.
En tal sentido, invito a dirigir nuestra mirada a los acontecimientos recientes ocurridos en los países de la región, con los ex presidentes de El Salvador, Mauricio Funes; Panamá, Ricardo Martinelli; Argentina, Cristina Fernández; Venezuela, Carlos Andrés Pérez; Perú, Alberto Fujimori, Alejandro Toledo, Martín Vizcarra, Pedro Pablo Kuczynski, Ollanta Humala, Alán García, Pedro Castillo; Brasil, Jair Messias Bolsonaro, inhabilitado por el Tribunal Supremo Electoral para ejercer cargos públicos hasta el año (2030).
La realidad es que, América Latina está convulsionada, en tal sentido la historia nos permite hurgar en los acontecimientos del pasado, para que no se repitan en el presente.
Como ejemplo, podemos observar que la Constitución de la República Federativa del Brasil, establece la figura del impeachment desde el 1891. La doctrina brasileña, define el proceso (impeachment), cuando posee las siguientes particularidades; 1.-tiene características políticas; 2.-se origina por causas políticas; 3.-busca resultados políticos; 4.-se instaura bajo consideraciones de orden político; 5.-es juzgado siguiendo criterios políticos; y 6.-no se excluyen, los criterios jurídicos.
En el caso de Brasil, no podemos olvidar la correlación existente entre el poder, la competencia y la responsabilidad que acumula el Presidente de la República al ejercer esas funciones, de tal suerte que las omisiones a sus funciones posibilitarían la destitución. El objetivo, es remover de su cargo e inhabilitar a funcionarios del Estado para el desempeño de cargo público por un espacio de tiempo determinado y con independencia de posibles sanciones penales adicionales. Fernando Collor de Mello, fue el primer presidente elegido por sufragio universal después del régimen militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985.