Dos grandes retos

Aunque aún mucha gente no se dé cuenta, es probable que el principal reto que encara la humanidad hoy en día es el del cambio climático.

Aunque las advertencias sobre sus efectos y resultados han estado siendo señaladas por varias décadas y aunque el tema parece haberse importantizado como para discutirse en los principales foros del mundo, parece ser muy poco lo que se ha logrado para detener el ya muy visible avance de este fenómeno de la naturaleza. Los que parecían señalamientos para prevenir el futuro ya han adquirido características y visibilidad de ocurrir en el tiempo presente.

Uno de los casos más visibles de esta realidad es la aparición masiva del sargazo en la zona intra-Caribe.

En el pasado, el sargazo conocido desde hace mucho tiempo, solo se percibía de manera escasa en una zona específica de la parte baja del Atlántico Norte.

Los glaciales están desapareciendo. El nivel de las aguas está subiendo. La temperatura del aire y las aguas tambien suben.

Por lo que se ha podido ver las grandes potencias económicas, mayormente responsables de lo que está sucediendo, hablan del tema, lo discuten, plantean potenciales soluciones, pero en realidad hacen muy poco al respecto.

¿Hasta qué punto podemos dejar que esto continúe para convertirse en una amenaza mortal para la especie humana?

El otro reto que ya se advierte es el del avance presuroso de la inteligencia artificial.

Aunque ya es un hecho que se puede detectar visiblemente en diversas aplicaciones de nuestra vida cotidiana, el factor multiplicador del avance de la tecnología hace pensar que hoy en día nos encontramos justo en el umbral de una explosión de esa IA que nos asombrará en diferentes aspectos.

Por un lado se señala que en la parte positiva seremos beneficiados con la amplia facilitación que la IA nos va a proporcionar en la realización de tareas domésticas, de trabajo y en todo tipo de problemas que requieran de búsquedas de soluciones.

Hay los que señalan que todas esas potenciales bonanzas tienen un precio: que se eliminaran puestos de trabajo, ya que las funciones robóticas desplazarán a los humanos.

Profundizando aún mas, en el plano negativo hay quienes han llegado a indicar que la IA, en su esencia, desarrollará la tendencia de desplazar y hasta llegar a eliminar a toda la humanidad.

Lo más probable es que ese pensar resulte en una gran exageración, ya que al fin y al cabo somos nosotros, los seres humanos, los que creamos esa IA.