La longevidad de Biden será su “talón de Aquiles” para el 2024

Los dos últimos percances de movilidad sufridos por el presidente Joe Biden, durante una graduación de cadetes de la Fuerza Aérea en Colorado Springs, Colorado, el miércoles cuando tropezó y se cayó frente a la tarima y el golpe en la cabeza al bajar del helicóptero que lo retornó a la Casa Blanca, hablan del tema de la longevidad para su repostulación en 2024.

En ambos casos al presidente le faltó prudencia de ir despacio chequeando los obstáculos de su camino, en vez de marchar ligero justamente para demostrar la agilidad que no puede tener a sus 80 años. Si ganara la convención del Partido Demócrata el año que viene, Biden tendrá el reto de convencer a los electores de que está hábil para mantenerse en el cargo.

No obstante, los líderes demócratas están respetando la primacía del incumbente para optar por un nuevo turno de 4 años, como lo autoriza la Constitución, pero se cavila en los mentideros políticos sobre todo de Washington, DC, qué pasaría si la aspiración tuviera que pasar a otras manos, como sería quizás en primer lugar a la vicepresidenta, Kama Harris.

En el caso extremo de que el presidente Biden retire su aspiración, la vicepresidenta Harris tendría la primacía, pero no sería obligatorio para el Partido Demócrata en su convención de agosto 2024 en Chicago, Illinois escogerla. Hay un puñado de candidatos que pudieran lanzarse al ruedo. Pocos anticipan que Biden dejará la carrera.

De ocuparle el honor Harris sería la primera aspirante presidencial negra y de ganar las elecciones haría historia como la primera mujer negra elegida a la Presidencia. Su background educativo la ayuda mucho. Es liberal y estudió derecho en la Escuela de Derecho de San Francisco, California y Ciencias Sociales en la Universidad de Howard, en Washington, DC.

Cuando asumió la Presidencia en enero de 2020, Biden comenzó a ser cuestionado por los periodistas sobre su salud y estado físico. “me di un coletazo”, explicó el presidente mientras conversaba con los periodistas a su retorno a la Casa Blanca procedente de Colorado el miércoles, poniéndole buena cara a un incidente menor que en su caso es mayor.

Biden quizás no ha arreglado con el Servicio Secreto y el Protocolo no ser expuesto a caminatas aun cortas en tarimas y a tomar medidas como ponerle el micrófono y discurso frente a su asiento en la mesa y no caminar hasta un podio. Obviamente que pese a hacer sus bicicletadas a veces, a sus 80 años no tiene el vigor y el equilibrio para moverse.

Una vez el presidente se cayó mientras subía rápido la enorme escalinata del avión Air Force 1, lo que motivó las alarmas de quienes vieron el percance. Luego se le enredaron los pies en los pedales de su bicicleta en una carrera en el vecindario de su casa en Rehoboth Beach, cerca de Delaware. En cada caso el jovial presidente se levantó sonriente.

Biden ha tenido un gobierno relativamente exitoso, aunque heredó de su antecesor, Donald Trump todo tipo de problemas, la remanencia de la pandemia Covid-19 que el antecesor no encaró y se burló de los científicos; el empleo ha aumentado consistentemente y lo muy malo que ha ocurrido es el aumento del bandidaje en las calles.

El techo de la deuda

El pasado jueves, el Congreso de los Estados Unidos, tras una brega que duró meses con la Casa Blanca aprobó la ley que eleva el techo de la deuda y pone fin a la amenaza de impago de los Estados Unidos, lo que causó tranquilidad en todos los sectores financieros del país y de las economías que dependen de alguna manera u otra de ese país. Las bolsas reaccionaron en positivo.

El Banco Central de la República Dominicana que esta semana tomó dos decisiones fundamentales que fueron reducir su tasa de política monetaria en 50 puntos básicos (de 8.50% a 8.0 ante el retorno de la inflación al rango de 4% más o menos al 1% y la Junta Monetaria dispuso estímulos por RD$94,000 millones para el financiamiento de la producción y los hogares a bajas tasas de interés se habría alegrado de las noticias provenientes de Washington, DC.

La ley sería firmada el viernes por la noche luego de un discurso desde la Casa Blanca, en el cual el gobernante explicaría al país el alcance de la misma, había sido aprobada el jueves por los senadores y la misma busca suspender el techo de la deuda estadounidense e imponer algunas restricciones al gasto del gobierno hasta las elecciones de 2024. El drama amenazaba una crisis mundial en economía.

El acuerdo fue un triunfo del presidente Biden y el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, pero peor para el gobernante que necesita el apoyo de todos, los conservadores y los liberales para poner bien en marcha su campaña electoral y ganar las elecciones de 2024 al que postule el Partido Republicano ya sea Trump u otro aspirante.

Biden se complació ayer al conocer que el mercado laboral del país aumentó en 339.000 puestos de trabajo en mayo, muy distante de las previsiones de que subiría 190.000. En abril el aumento de la población laboral fue de 294.000. Según la oficina de estadística laboral, el aumento se registró en los servicios profesionales y comerciales, gobierno, salud, construcción y otros.

Republicanos sal al ruedo

Los líderes republicanos que aspiran reemplazar al pretendido candidato presidencial y ex presidente Donald Trump están saliendo al ruedo. La primera que lo hizo a mitad de febrero fue Nikki Haley, ex gobernadora de Carolina del Sur y ex embajadora en Naciones Unidas bajo Trump. La siguió el gobernador Ron De Santis, quien apareció en su acto de campaña con su mujer e hijo.

El ex vicepresidente Mike Pence se lanzará la semana que viene, con más fe ahora que se le ha exonerado por el manejo impropio de documentos clasificados. Pence ocupó un papel importante el 6 de enero de 2020 cuando certificó desde la presidencia del Senado, que le tocaba debido a un empate entre senadores demócratas y republicanos, que la elección de Biden había sido regular.

También el senador en plaza de Carolina del Sur, Tom Scott está en la campaña; Tom Cruz, el senador de Texas no ha descartado entrar en la lidia, como tampoco Chris Sununu y el ex gobernador de New Jersey y amigo separado de Trump, Chris Christie. Hasta Mike Pompeo, ex canciller de Trump podría lanzar su candidatura en los próximos días. Tal es el calor de la incipiente campaña electoral norteamericana.