Leonel demuele rendición de cuentas
El análisis demoledor que hizo Leonel Fernández del discurso de rendición de cuentas del presidente Luis Abinader, junto a las perspectivas que tiene su candidatura carente de una obra significativa, han generado como respuesta un fuego graneado con todo tipo de armas contra el presidente de la Fuerza del Pueblo.
No es la primera vez que Abinader pellizca la obra de gobierno de Fernández, pero esta vez saltó por encima de 8 años de Danilo Medina, para irse a comparar con el líder del PLD citando cifras del pasado para presentarlo como mal presidente.
Pero es curioso que ningún funcionario o congresista, es más, ni las bocinas, han descalificado el análisis de Leonel, que enfocó no solo el incumplimiento de las promesas, también las fallas en diferentes áreas como educación, medicina, el transporte, el costo de la vida y la seguridad pública.
Al enumerar las fallas calificó como una obra de ficción el discurso de Abinader quien aún no sabe cómo explicar si en el 2021 el crecimiento fue del 12% o 4 y pico por ciento porque el 2022 los resultados son peores con un crecimiento económico en el que el aumento del empleo son botellas en la administración pública.
El gobierno daña todo lo que ha recibido: el servicio 911 está desarticulado; en los hospitales y las medicinas hay una sola queja; aunque el petróleo sigue bajando mantiene congelado el precio de los combustibles; los apagones de largas horas aumentan y las Edes borraron los circuitos de 24 horas; sobre el precio de los alimentos se sabe que siguen subiendo y ante el desastre administrativo en vez de empeñarse en lograr alguna obra la decisión de Abinader es comprar alcaldes y destinar el dinero del pueblo en publicidad para bloquear la voz de la oposición.
La estrategia es comprar a todo el que se venda, pero muchos candidatos han ganado saltando con su popularidad el bloqueo oficialista, porque la verdad no se puede ocultar: el pueblo pasa hambre, no tiene servicios en los hospitales y anda con miedo a todas horas.