Dios de lo imposible
“Porque nada hay imposible para Dios”, Lucas 1:37.
Fue el ángel Gabriel que le dijo a María sobre el Espíritu Santo en ella y el poder del Altísimo cubriéndola, a fin de nacer el Hijo de Dios. La acción directa del Señor a favor de una humilde virgen de Nazaret.
Igual referencia está en Génesis 18:14. Allí Sara, la anciana mujer de Abraham, se le anunció el nacimiento de su hijo. Eso ocurrió, “según el tiempo de la vida”. ¿Hay para Dios algo imposible?
Él salva, sana, libera, hace justicia y da de comer. Él rompe cadenas, abre y cierra puertas. Puesto que todo es posible para Dios.