Estado de la transformación digital en la República Dominicana
El informe “Revisión multidimensional de la República Dominicana” publicado por el Ministerio de Economía, la Unión Europea y el Centro de Desarrollo de la OCDE, muestra que el progreso en las diferentes dimensiones del bienestar ha sido insuficiente.
El documento aborda las disparidades sociales, económicas y territoriales siguen siendo importantes, y las instituciones públicas siguen siendo insuficientemente sólidas.
La economía digital se aborda en el quinto eje, titulado “Lograr la transformación digital para el desarrollo inclusivo y sostenible en la República Dominicana”, donde recolectamos los principales desafíos y oportunidades de la transformación digital en el, luego de la conversación realizada con el organismo durante la fase de consultas.
Vemos que algunas recomendaciones políticas fueron plasmadas en el documento. Esperamos que la transformación digital sea un catalizador para una mayor inclusión y un mayor bienestar para todos.
Aunque las autoridades han realizado avances significativos en la última década, todavía hay importantes brechas digitales en diferentes segmentos de la sociedad. El país todavía está rezagado frente a sus pares regionales en varias dimensiones.
Como resultado, el progreso hacia una transformación digital en la República Dominicana muestra resultados mixtos:
1) El acceso y el uso han mejorado notablemente. El 80 % del acceso a Internet de banda ancha móvil es a través de dispositivos móviles.
2) Las brechas digitales persisten y se han vuelto particularmente evidentes a lo largo de la pandemia de COVID-19. La diferencia entre la región con la mayor proporción de hogares con conectividad a Internet y la más baja es de 45,8 por ciento.
3) La disponibilidad, la asequibilidad y la calidad de los dispositivos digitales siguen siendo un desafío para una mayor conectividad en los hogares. El 26,7 por ciento de los hogares en la República Dominicana en 2018 tenían computadoras.
4) El acceso a las TIC en las escuelas ha aumentado, pero debe ampliarse a todo el sistema educativo para cerrar las brechas existentes. Sin embargo, esto es solo parcialmente cierto, ya que todavía existen brechas notables entre los diferentes grupos socioeconómicos.
5) COVID-19 ha demostrado los riesgos y beneficios del aprendizaje en línea. Existe un largo camino por recorrer para mejorar el acceso a las plataformas de aprendizaje en línea basadas en el hogar.
6) El avance hacia un sistema educativo verdaderamente digitalizado con mejores resultados educativos implica ir más allá del acceso a las TIC. Por tanto, se deben transformar profundamente las prácticas de enseñanza y aprendizaje.
7) Las tecnologías digitales pueden ser un catalizador para el crecimiento de la productividad. Por ejemplo, las tecnologías digitales tienen un gran potencial para transformar la industria agroalimentaria en la República Dominicana.
8) La incorporación de tecnologías digitales no es suficiente para aumentar la productividad; se requiere un ecosistema digital. Tener un sólido sistema de innovación es fundamental para aprovechar al máximo la transformación digital. La inversión en I+D es baja en el país.
9) La transformación digital de la economía implica articular el apoyo a las empresas en la adopción y adaptación a las nuevas tecnologías. Debemos trabajar en las discrepancias en el uso de la tecnología básica según el tamaño de la empresa.