Inaceptable
Los lamentables acontecimientos acaecidos la víspera, donde un par vehículos fueron impactados por piedras lanzadas desde dos puentes peatonales localizados en importantes vías de la ciudad capital, y donde resultó muerta una persona, merecen no solo la repulsa colectiva, sino la necesidad de un fuerte castigo para los perpetradores.
Joel Raphael Cabrera, agrimensor de 28 años, falleció luego de que a su jeepeta le tiraran una enorme piedra que le rompió el cristal delantero cuando se desplazaba por la avenida 27 de Febrero del Distrito Nacional en horas de la madrugada.
Llama la atención que el otro atentado acaeciera a solo horas de la primera tragedia cuando un ciudadano denunció a través de un video colgado en las redes sociales que a su vehículo le lanzaron un block, desde una estructura similar, pero de la avenida John F. Kennedy, también en horas nocturnas y que no lo mató de casualidad.
Hechos deleznables y que la Policía Nacional investiga atribuyéndolos, como premisa inicial, a haber sido realizado por algún indigente, pero que la población no cree y que atribuye a una banda de antisociales ya que, primero, no es la primera vez que sucede, y segundo, porque fueron realizados con nocturnidad y asechanza.
Se recuerda que hubo un momento en que algunas de nuestras autopistas fueron escenarios de este tipo de vandalismos para robar a sus víctimas. Por tanto, y al margen de cuales fueran las causas o razones, se hace urgente dar con los responsables para castigarlos de una forma ejemplarizadora, al tiempo de garantizar mediante la vigilancia física y tecnológica que casos como estos, y que hacen tanto daño a la imagen del país, no vuelvan a suceder.