Señales confusas del tema Haití
En los últimos días se han estado produciendo una serie de acciones oficiales que han creado confusión en el país acerca de cuál es la línea del gobierno dominicano con el crucial tema Haití.
La ofensiva sin precedentes de un nuevo ministro de Economía, ex consultor ONU, ha dejado perplejo al país, pues lejos de concentrarse en los aspectos económicos de sus funciones, se ha despachado como una especie de Ministerio de Frontera y aspectos migratorios. La ofensiva del nuevo Ministro arrancó con un injusto ataque a la patriótica marcha que organizara el Instituto Duartiano para exigir a la Comunidad Internacional su urgente intervención para evitar el colapso total de Haití. El éxito resonante de la marcha, irritó al ministro Pavel Isa, el también hijo de Narciso Isa Conde, quien usó su cuenta de twitter para criticar la marcha e insinuar que estaba inspirada en bajos sentimientos de odio y atropellos.
Pero el nuevo Ministro de Economía siguió la ofensiva con una visita a la frontera anunciando planes de desarrollo inclusivos “para la gente “ que vive en esa zona, sin mencionar en ningún momento la prioridad nacional asumida por el Pte. Abinader de crear empleos para los dominicanos fronterizos.
Es obvio que entregarle la Política de Frontera al Ministro Isa y a connotados empresarios del Plan Quisqueya Binacional sería una estocada mortal en el corazón de la República, ya que esta política estaría orientada a aumentar la haitianización de la frontera, contrariando así el mandato constitucional que ordena que todas las políticas de desarrollo tengan el norte de su dominicanización.
Pero la preocupante ofensiva del nuevo Ministro abarca también la realización del Censo Nacional de Población, en momentos en que la nación está siendo atacada en el extranjero de “tener cientos de miles de apátridas”, refiriéndose a haitianos ilegales que alegan haber nacido en RD y reclaman nacionalidad dominicana.
Es evidente que el censo no puede ser dirigido por ONU, ni sus empleados en RD, los que también planean introducir en el censo lo relativo a cuantificar la población por su etnia, color de piel y raza. Introducir aquí el germen de la división racial en el censo de la población, lo que sería una canallada sin precedentes, además de un atentado a la Unidad Nacional.
Todo lo que ha hecho el Ministro de Economía coincide con la percepción de parálisis o “paso de hicotea” en la construcción del Muro y la salida de Enrique García de Migración, que estaba ejecutando repatriaciones de ilegales.
Estas señales crean confusión sobre cuál es la política del gobierno con respecto al tema Haití y cuestionan en los hechos todo el discurso valiente y responsable del Pte. Abinader sobre este tema crucial para la suerte de la República.
Creo el tema Haití será factor determinante en el proceso electoral del ´24. Si el Presidente deja que el grupo de funcionarios fusionistas tengan agenda propia y le tumben el rumbo trazado por él sobre estos aspectos cruciales, tendrá que pagar un alto costo político electoral.