Nada está bien
He usado por aquí mismo la palabra perversos para señalar la oposición que desde el PLD y de la Fuerza del Pueblo, o sea Danilo y su socio y hermano Leonel le hacen al gobierno de Luis Abinader.
Uno acabado de salir del poder, sindicado por la justicia y una gran parte de la nación como el gobierno más corrupto de la historia, y el otro jugando a ser el mejor, a la amnesia que supuestamente sufren los dominicanos y a los años que tienen varios hechos imputados a sus tres gobiernos.
Mientras sucede esa aberración, producto en gran medida de la desesperación, el Presidente trabaja 20 y más horas diarias en busca de soluciones para los males dejados por la pandemia y los actuales producto de la guerra.
Será el tiempo y el voto mayoritario del pueblo en las urnas quien diga si los dominicanos somos un atajo de imbeciles o un país que sabe reconocer el trabajo y la honestidad de un Presidente excepcional entregado a trabajar sin mirar para atrás y sin hacer caso a los perversos.