AGENDA SOCIAL
Un pacto de damas y caballeros
Los aspirantes presidenciales del Partido de la Liberación Dominicana hemos firmado un acuerdo para la pre-selección del precandidato del Partido que acudirá a las elecciones del año 2024. Una vez más se fortalecen los valores democráticos en la República Dominicana, porque cuando un Partido abraza ideales manifestados en el diálogo, a la vez, se aporta al fortalecimiento del sistema electoral y, por ende, de la democracia misma.
En su reunión del Comité Central del pasado domingo, el Partido de la Liberación Dominicana también dio muestras de su confraternidad, unión y fortaleza interna, al reunir a su principal órgano de dirección en cumplimiento de lo que establecen los estatutos, no para acomodar decisiones a intereses individuales, sino para someter a la consideración de este órgano un conjunto de decisiones trascendentales para el futuro de nuestra organización política.
Pero como decía el profesor Juan Bosch, citando un concepto martiano, en la política hay cosas que se ven y hay cosas que no se ven; las cosas que no se ven, suelen ser más importantes que las que no se ven. Solo quienes estuvimos presentes en la reunión pudimos observar el ánimo positivo del peledeísta, su convicción de que la organización va por un buen camino y la energía y el entusiasmo de cada uno de los militantes, que hemos colocado el bienestar del país por encima de cualquier aspiración personal.
En la reunión también vimos frutos del compromiso partidario con la equidad de género. Por primera vez, un partido político en la República Dominicana acudirá a un proceso interno con paridad de género entre sus candidaturas: tres mujeres y tres hombres nos presentaremos como opción a la Presidencia, en igualdad de condiciones y con el compromiso de respetar y asumir como propio, el resultado de un proceso transparente y democrático. También fuimos testigos del compromiso peledeísta con la ética política. Con gran entusiasmo, decenas de peledeístas se postularon para ser parte del Tribunal de Ética y Disciplina previsto en los Estatutos de la organización, una muestra adicional de que existe un compromiso de colocar a la organización por encima de las personas. Finalmente, la aprobación del pacto de damas y caballeros entre los aspirantes a la Presidencia es un augurio del éxito del proceso interno del PLD, porque dicho acuerdo fue el resultado del consenso y el disenso productivo, de las ideas encontradas y la búsqueda del espacio común, pero, sobre todo, del compromiso inequívoco de los firmantes con la democracia, la transparencia y el desempeño de un proceso apegado a la ley y a las buenas costumbres.
Este tipo de experiencias son aleccionadoras para los partidos, enfrentados al descrédito a nivel mundial y con el gran reto de volver a conectar y representar a los ciudadanos. Dimos el primer paso. Ahora nos toca continuar por ese mismo sendero.