Victorioso en la adversidad

Algunos hombres son destruidos por la adversidad; otros se levantan triunfantes sobre ella. Frederick Douglas, gran orador, notable abolicionista de Estados Unidos (1817-1895), hijo de un padre blanco y una esclava negra, defensor antiesclavista que compró su libertad y fundó el periódico The North Star, logró surgir victorioso en la hora más oscura del infortunio.

En el momento más difícil de su existencia, Douglas llegó a decir: “Tenemos en contra al hombre blanco, tenemos en contra al gobierno; tenemos en contra el espíritu de nuestra época. No veo esperanza alguna para la raza negra. Estoy agobiado por la tristeza”.

Frederick hablaba como un hombre desalentado, un hombre convencido de que había tocado fondo. Pero del público se oyó la voz de una anciana, que le gritó: “Frederick, ¿ha muerto Dios?”. Estas solas palabras revivieron su espíritu, y de ahí en adelante el hombre pesimista y abatido por la desventura se tornó un valiente luchador por sus principios.