Vehículo con piezas viejas

El hecho es curioso, pero también interesante: en una circunstancia de cambio no todo el mundo tiene ánimo de cambio.

Explico.

El Ejecutivo, cuando convoca a la conformación de las llamadas altas cortes, demanda determinado perfil de los aspirantes.

Repetirlo sería cliché, aunque la calidad más importante es la independencia. La independencia es un embullo difícil de llevar, pero se acepta, y el consenso se hace.

Sin embargo, si se observa bien, la condición de nuevo es un elemento que se impone en todas las experiencias y debe resaltarse.

En cada oportunidad, los antiguos titulares, el personal que se supone será sustituido, se presentan al escrutinio, buscando reeditarse en el puesto.

No le precede denuncia, ni se le acusa de nada indebido en el pasado ejercicio de susfunciones. Se les examina, se les oye, pero al final se les descarta.

Los consejeros no cogen muela, como igual podría decirse de los senadores con los miembros de la Junta Central Electoral y la Cámara de Cuentas.

De ahí que llame la atención que estos órganos no actúen a su vez en los mismos términos, reclutando e integrando a técnicos diferentes.

Que el cambio se sienta arriba y opere abajo.

El caso de la Junta, por ejemplo, que acaba de ratificar a sus directores de áreas. Incluso, una decisión tomada a unanimidad.

No puede olvidarse febrero de 2020, cuando hubo de suspenderse las elecciones municipales, sin que se conozcan las intimidades del suceso.

Entonces fueron los titulares que no pudieron repetir, a pesar de las diligencias de algunos, pero también los responsables de las dependencias claves.

La OEA no dio pie con bola, y lo mismo UNIORE, originándose un gran misterio que difícilmente pueda despejarse si se premia al personal de sustento.

El Informe dio cuenta de fallas, de faltas, y aunque no culpó penalmente a nadie, no puede haber dudas de que el estropicio fue cometido dentro.

Si se castigó a los titulares, igual suerte para sus subordinados. Conservar la mitad de la JCE de febrero 2020 no tiene sentido, y un vehículo con piezas viejas, siempre dará problema.