Opinión

Historia

Trujillo financió el ingreso de españa a la ONU

El primer Embajador de España en Santo Domingo, Manuel Aznar, abuelo de José María Aznar, reportó en 1950 a su Gobierno que, el general Trujillo era el hombre más rico de Hispanoamérica, tanto que en 1947 a la España pobre de entonces, le ofreció un préstamo personal de USD$ 3.0 millones para su flota mercante. El poder económico del dictador era mayor porque además controlaba las finanzas públicas y lo hacía en medio de una ausencia absoluta de democracia y medidas de control.

Esa España pobre y aislada del mundo, cuyo ingreso a la ONU, al terminar la Segunda Guerra Mundial, fue rechazado en 1946 encontró en el eficaz servicio diplomático de esta pequeña nación, una de las 47 fundadoras de dicha entidad, un aliado inestimable.

La Resolución 39 que apertura en la ONU la Cuestión de España –negándole el ingreso- fue aprobada por 34 votos, que incluían 17 países latinoamericanos y Estados Unidos; España sólo contó con seisvotos: Argentina, CostaRica, Ecuador, ElSalvador, Perú y República Dominicana: La ONU tenía entonces 54 países miembros.

Trujillo, para sumar los votos necesarios, mientras la diplomacia española discutía si su admisión era en votación simple o especial, comprometió el pago para que Haití, que por su pobreza extrema no podía mantener una embajada, empero que representaba un voto, pudiera abrir su legación diplomática en Madrid. Igual tuvo la responsabilidad de obtener, según los documentos confidenciales de la Embajada de España del 15 de agosto de 1950, los votos de El Salvador y de Bolivia.

Como apuntan las correspondencias del Embajador Aznar, fue a través de República Dominicana –no obstante la postura de USA- que montó la estrategia y buscó los votos necesarios para que en 1951 se le permitiera participar de algunos organismos y, en diciembre de 1955 ingresar de pleno derecho, con solo 10 votos en contra y 12 abstenciones, de los cuales solo tres, México, Guatemala y Uruguay, eran americanos: Cuba se abstuvo, como lo hizo Inglaterra y su área de influencia: La ONU ya tenía 60 miembros.

Conviene tener presente que la bipolaridad expansionista de la URSS y de USA, que dividió al mundo en dos ejes políticos y económicos, unido al fracaso del cerco que la ONU quiso tender a España, contribuyó a que la postura de Estados Unidos relativa a Franco, variara, espacio que aprovechó la diplomacia de Trujillo para reunir una creciente cantidad de votos latinoamericanos.

Es por ese motivo, independiente de la larga relación Trujillo-Franco que, a su llegada a Vigo el 3 de junio de 1954, de donde se traslada a Madrid, en el momento de mayor esplendor de la Era de Trujillo, que, al recibirle el Caudillo de España con una multitud estimada en 600 mil personas –nunca antes reunida– franqueado por la Guardia Mora, la prensa le saluda titulándolo: Leal y fiel amigo en los tiempos de la soledad.

Para entonces, iniciada la Guerra Fría, el Benefactor era posiblemente –a través de un lobby bien pagado y eficaz- el líder político más influyente de América Latina, capaz de organizar el asesinato del Presidente Castillo Armas de Guatemala en 1957 a través de Johnny Abbes y, pocos años más tarde, suministrar las armas para el intento de magnicidio del Presidente Rómulo Betancourt de Venezuela.

El Generalísimo, a quien Franco dedicó una semana de compañía personal con su gabinete y familia, viajó al Vaticano para la firma del Concordato el 16 de junio, su punto más alto con la Iglesia Católica y, en su regreso a España completó un mes de pompa y lujo con la nobleza española: De ese viaje, regresó loco a la inauguración en diciembre de 1955 de la Feria de la Paz y Confraternidad del Hombre Libre, una de sus obras urbanísticas, cumbre.

Para su ego fue un golpe tan fuerte el rechazo de Franco a concederle el título de Marqués de las Canarias, que llevó al Foro Público al Canciller Enrique de Marchena y propició la caída en desgracia de Anselmo Paulino, condenado a 10 años de trabajos públicos: Pronto, el efecto económico del esfuerzo de financiar el jubileo se hizo evidente, arreciaron los problemas políticos con el secuestro de Galíndez en 1956 en Estados Unidos, la Expedición de Constanza, Maimón y Estero Hondo en 1959, el affaire con Rómulo ya mencionado en 1960, la condena y embargo de la OEA, el rechazo de la iglesia católica al régimen y el crimen de las Hermanas Mirabal en noviembre de 1960, sellaron la suerte para la caída de la tiranía a mano de –la mayoría- colaboradores descontentos el 30 de mayo de 1961.

Tags relacionados